Un nene de 9 años murió repentinamente al regresar de unas vacaciones en Tenerife. Su familia está desconcertada porque no sabe qué fue lo que le ocurrió, ya que el chiquito no estaba enfermo ni presentó ningún síntoma que anticipara el lamentable desenlace.
El hecho ocurrió en Reino Unido el pasado 14 de septiembre, mientras regresaban a Gales después de disfrutar de unos días de descanso en España. “No tenemos respuestas y todavía no tenemos ni idea de lo que pasó”, dijeron sus familiares a los medios locales.
El chiquito, identificado como Freddie Pritchard estaba en perfecto estado de salud y por eso su familia no sale de la sorpresa y la conmoción. “No se puso enfermo ni nada parecido”, aseguraron sus familiares completamente impactados por lo ocurrido.
La tía de Freddie, Jessica Tomlinson, en diálogo con el portal británico North Wales Live, dijo que el nene “tenía un carácter increíble y era muy divertido, siempre estaba riéndose”. La mujer recordó que “todo el mundo que lo conocía se enamoraba al instante de su sonrisa pícara y sus travesuras”, y agregó: “Nada será lo mismo sin él”.
“Fred era el mejor tío, su hermano había tenido un bebé e idolatraba a su sobrinita Arabella. Aprendió a nadar en sus vacaciones, estaba muy orgulloso de sí mismo”, dijo al mismo medio otro de los integrantes de su familia.
Sus seres queridos no encuentran consuelo desde su partida y exigen que se investigue qué fue lo que ocasionó la muerte del chiquito. Mientras tanto, abrieron una página en ‘GoFundMe’ para recaudar dinero para los gastos del funeral de Freddie.
En menos de dos semanas, recibieron donaciones por más de 7.500 libras, lo que equivale a casi 10.000 dólares, según informó el diario ‘Express’. Sus familiares dijeron que el dinero que sobre será donado a organizaciones de caridad.
