En una noticia que sorprende por lo alentadora, Vladimir Putin decretó un cese del fuego por 36 horas en la guerra entre Rusia y Ucrania. El líder del Kremlin aceptó un pedido que le hizo el patriarca Kirill, líder de la iglesia Ortodoxa en ese país para poder celebrar la navidad de ese credo en paz.
La iglesia ortodoxa rusa tiene un desfasaje en cuanto a la Navidad con relación al resto de la cristiandad. Por eso, este año, la celebración será a partir del 6 de enero hasta el día 7. Así, por primera vez en más de 10 meses, no habrá ataques de Rusia sobre Ucrania.
Una tregua de 36 horas
El comunicado oficial de Kremlin dice: "Teniendo en cuenta el llamado de su santidad el patriarca Kirill, instruí al ministro de Defensa que ordene un régimen de cese el fuego en toda la línea de contacto entre los bandos en Ucrania a partir de las 12horas del 6 de enero de este año hasta las 24 horas del 7 de enero”, establece recogiendo una decisión personal de Vladimir Putin.
Sin embargo, el pedido del patriarca ruso no tuvo buena acogida entre los ortodoxos ucranianos que no siguen a Kirill. Están totalmente enemistados con él por haber impulsado a Putin a invadir su territorio.
El asesor de la Presidencia ucraniana, Mijailo Podolyak, expresó que la "tregua navideña", es una trampa cínica y un elemento de propaganda. El propio Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania, dijo reiteradas veces que sentarse a negociar una tregua para la paz se hará solo cuando Putin retire a todos sus soldados que invadieron su país.
En los últimos días de 2022 y el inicio de 2023, Ucrania atacó con dureza las posiciones rusas sobre la región del Donbás, el motivo inicial de la invasión. Kiev anunció que había provocado la muerte de 600 soldados de la Federación Rusa. En tanto, el Kremlin admite solo 90 bajas, aunque cada día reconoce un número mayor.
En medio de esta situación, cerca de cumplir 11 meses en guerra, Vladimir Putin decretó una tregua por 36 horas.