Alberto Fernández le tomó juramento como nuevo jefe de Gabinete a Agustín Rossi, en reemplazo de Juan Manzur. El acto de asunción del saliente interventor de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) se desarrolló en el Museo del Bicentenario de la Casa Rosada.
Antes de la jura, el Presidente le agradeció a Manzur, que vuelve a la provincia de Tucumán para ocuparse de la campaña de Jaldo.
“Firmemos con la bic negra en honor a Néstor”, remató, en lo que sonó como una indirecta a Cristina Kirchner, que le había pedido que “use la lapicera”.
Rossi es uno de los funcionarios más estrechos del Presidente y a partir de ahora está al frente de una de las áreas estratégicas del Gobierno, que tiene a su cargo la coordinación de los ministerios y el seguimiento de la gestión. Más allá de su rol institucional, el dirigente santafesino será uno de los “voceros” designados para salir en defensa de la gestión, en un año electoral y en medio de las fuertes tensiones puertas adentro del Frente de Todos.
Rossi llega al Gobierno con varios objetivos concretos: ordenar al Gabinete, defender la administración de Alberto y “poner en valor la gestión”, es decir, mostrar que hubo resultados. Su ingreso es importante para el primer mandatario, ya que se trata de un “moderado” que -al menos hasta ahora- no tuvo grandes chispazos con el kirchnerismo duro, por lo que se presume que ayudará a mejorar la convivencia interna en tiempos de elecciones.
Rossi aceptó ir a la AFI sin haber estado del todo convencido: lo hizo para “cumplir con el Presidente y aceptar los desafíos que le toquen”. Ahora enfrentará desafíos todavía más complicados.
Los desafíos de Agustín Rossi como nuevo jefe de Gabinete
Agustín Rossi asumió su nueva función en un contexto difícil. La interna en el Gobierno y el hecho de que Manzur estuviera con su atención puesta en la campaña en Tucumán arrojó una triste estadística: desde hace casi tres meses no se produce una reunión de gabinete para coordinar y articular políticas de gobierno conjunta entre los ministerios.
De hecho, la última fue el 30 de noviembre de 2022 y desde entonces el gabinete no se volvió a reunir nunca más. Por eso, tras la salida de Manzur, Alberto Fernández busca ordenar el gabinete para que en un año electoral la gestión pueda mostrar la mayor cantidad de resultados posible. Todo con el objetivo de seguir poniendo en valor su trabajo al frente de la Casa Rosada y sostener sus actividades en clave electoral con recorridos por el interior.
En el último tiempo, Manzur, gobernador de Tucumán en uso de licencia, se orientó definitivamente hacia su provincia, en donde será candidato a vice en una fórmula junto a Osvaldo Jaldo. Hay quienes no descartan que luego se lance a la presidencial y busque competir en las PASO.
En este contexto, Rossi buscará “darle un relato” al Gobierno. Se trata de un dirigente con experiencia, de peso, que va a defender la gestión. Y se sumará a las voces que ya defienden al Presidente, como Victoria Tolosa Paz (Desarrollo Social) o Aníbal Fernández (Seguridad).
Rossi, en una de sus últimas declaraciones, respaldó la decisión del Presidente de convocar a la mesa política del Frente de Todos, una de las exigencias de La Cámpora. El funcionario dijo que “hay que clarificar que el Presidente hace la convocatoria como titular del Partido Justicialista (PJ)” y que “el objetivo es ir viendo cómo se conforma el panorama electoral para el peronismo y el FDT”, en declaraciones a FM La Patriada.
Los cambios se producen mientras Alberto se mantiene en clave electoral y aprovecha cada recorrida para defender su gestión con un único objetivo en mente: ganar las PASO y ser candidato a la reelección.