Las resultados de los estudios complementarios de la autopsias a dos de los cincos bebés muertos a poco de nacer en el Hospital Materno Neonatal Ramón Carrillo, de Córdoba, confirmaron lo que las familias habían denunciado: los niños perdieron la vida como consecuencia de "exceso de potasio", sustancia que fue "inyectada de manera intencional".
La información, publicada por la agencia Télam y medios locales como ElDoce, fue confirmada por fuentes vinculadas a la causa, en la que hay una enfermera detenida e imputada por homicidio calificado reiterado.
Según se consignó, el informe de la autopsia detalla que "se detectaron sustancias tóxicas incompatibles con la vida".
Los datos forenses corresponden a dos de los cuerpos de bebés fallecidos, del total de cinco casos que investiga el fiscal Raúl Garzón. Se trata de los fallecidos el 6 de junio, que desencadenaron la investigación de otros casos similares.
El fiscal Garzón había manifestado que "la enfermera se la detiene por dos hechos, que son los que al día de la fecha se ha podido avanzar en los estudios complementarios de las autopsias de dos de los niñitos fallecidos".
"Obviamente que es una instancia preliminar, falta complementar sobre los otros hechos", aseveró y precisó que si bien la investigación inicial se dio sobre cinco bebés muertos, en total son 13 los casos que se estudian, entre los fallecidos y otros que sufrieron serias consecuencias y sobrevivieron, había manifestado luego de la detención.
La noche fatídica que desató el caso
Tal como contó Clarín, la noche del 6 de junio el Hospital Materno Neonatal "Dr. Ramón Carrillo" era un revuelo de enfermeros, obstetras y médicos corriendo. En el trascurso de poco más de 24 horas, cinco recién nacidos que presentaban buen estado de salud desmejoraron sin causa aparente hasta fallecer o quedar con secuelas.
El resultado de la autopsia coincide, por ejemplo, con los análisis de sangre que se hicieron sobre Pilar, una de las bebas que sobrevivió, a quien se le encontró esta sustancia.
Maria Martin, mama de Pilar, una de las bebas que sobrevivió. Foto Javier Cortez
Este viernes, la Justicia de Córdoba detuvo a una enfermera, Brenda Agüero (27), bajo la carátula de "homicidio calificado por procedimiento insidioso". Las pruebas apuntan a que habría sido ella quien inyectó a los bebés con esa sustancia.
La joven, que había empezado a trabajar en esa institución provincial en diciembre de 2020, fue detenida en Río Ceballos. Según recogieron medios de Córdoba, la detenida se caracterizaba por ser “muy prolija, trabajadora, proactiva y dotada de una gran pericia”.
Familiares pidieron justicia por el caso de los bebés muertos en el hospital de Córdoba. Foto: Javier Cortéz
Los investigadores apuntaron a Agüero por ser la autora del "cuarto pinchazo". "En el caso de vacunas, se colocan la hepatitis B y la BCG, y en medicación, la vitamina K", explicó el neonatólogo, Héctor Ferreira, a Telenoche sobre los tres pinchazos que recibe un bebé. Eso llevó a la Justicia a apuntar hacia el cuarto y letal pinchazo que habría efectuado la enfermera.
El Ministerio Público Fiscal de Córdoba informó que fue el fiscal Raúl Garzón, a cargo de la investigación, quien tomó la determinación de acusarla formalmente. Así fue el que imputó a tres exdirectivos del Neonatal entre las que figura la exdirectora, Liliana Asís. Todavía se espera el resultado de pericias sobre otros doce casos, tres muertes y ocho sobrevivientes.
Formalmente, la Directora del hospital, el Jefe de Departamento de Neonatología y la Jefa del Servicio de Neonatología fueron imputados por omisión de los deberes de funcionario público.
Además, la Fiscalía dispuso designar a Eduardo Caeiro como representante legal de los bebés fallecidos y los que sobrevivieron. El letrado controlará los actos en la instrucción de la causa y de los jueces de las distintas instancias. Caeiro señaló que respalda a la investigación.
