Cinco integrantes de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA) fueron condenados ayer, cuatro de ellos con penas de cumplimiento efectivo, por haber disparado en enero de 2016 contra un grupo de vecinos que ensayaba para una murga en el Barrio 1-11-14, en el Bajo Flores porteño, y herir al menos a cinco personas, entre ellas a un niño de 8 años, informaron fuentes judiciales.
El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 12 le impuso a Esteban Rafael Smolares (37), Saúl Humberto Juárez (36), Darío Fernando Solez Páez (33) y Elvio Ezequiel Cardozo (44) la pena de 3 años y 6 meses de prisión y de cumplimiento efectivo, mientras que Yanina Soledad Maldonado (32) recibió 3 años en suspenso, todos ellos como coautores del delito de "vejaciones en concurso ideal con lesiones de importancia leve, por mediar abuso de las funciones de miembros integrantes de una fuerza de seguridad y ambas figuras agravadas por el uso de un arma de fuego".
Los jueces Claudia Moscato, Luis Márquez y Darío Martín Medina también resolvieron que los gendarmes no puedan ejercer la función pública por siete años y la mujer por seis, en tanto que Guido Eliel Cativa (33) fue absuelto.
El TOC 12 rechazó el pedido de inmediata detención realizado por la fiscalía y dispuso que deberán presentarse dentro de los cinco días desde que el fallo quede firme para comenzar a cumplir las penas.
En tanto que los fundamentos de la sentencia se darán a conocer el próximo miércoles, añadió el Tribunal, que también les indicó a todos los imputados "la obligación de abstenerse de tener todo tipo de contacto y por cualquier medio con las personas damnificadas y de acercarse en un radio de 500 metros al Barrio Ricciardelli de esta ciudad, ex Barrio 1-11-14".