Este viernes fue detenida la enfermera Brenda Agüero. Es la principal acusada en la causa que investiga la muerte de cinco bebés en el Hospital Materno Neonatal de Córdoba. La mujer de 27 años trabaja en el centro hospitalario desde diciembre de 2020. También fueron imputados tres exdirectivos por responsabilidades funcionales.
Agüero quedó aprehendida e imputada por “homicidio calificado reiterado”. La calificación legal que se le adjudica a la mujer de 27 años la considera responsable del asesinato en serie de bebés nacidos en el hospital. Los cinco casos sospechosos ocurrieron entre marzo y junio de este año, pero el fiscal acusa a la enfermera por los casos del 5 y 6 de junio, sobre los cuales hay autopsias.
Según la Justicia, Agüero habría “suministrado sustancias tóxicas” a dos bebés y por eso el fiscal Garzón eligió la figura penal de “homicidio calificado por uso del medio insidioso”.
También quedaron imputados tres exdirectivos del Hospital Materno Neonatal por responsabilidades mediatas vinculadas a su función, como la omisión de deberes de funcionario público.
Liliana Asís, exdirectora del centro de salud, es una de las acusadas por el fiscal Garzón. También fueron imputados la jefa de Neonatología, Marta Gómez Flores, y la jefa del departamento de Neonatología, no identificada aún.
Esta mañana, el Ministerio de Salud decidió dispensar a tres jefes de área: Obdulio Paredes, jefe de Tocoginecología; Marta Gómez Flores, jefa de Neonatología; y Alicia Ariza, jefa de Enfermería.
La semana pasada el ministro de Salud, Diego Cardozo, había dispuesto el reemplazo de Asís y de la subdirectora, Claudia Rigenheilm. En su lugar, fueron designados en forma interina el director de hospitales de Capital, Esteban Ruffin; y la directora de Maternidad e Infancia, Marcela Yánover.
Prolijidad inigualable y pericia extrema: el currículum de la enfermera Brenda Agüero
Previo paso por el Allende, donde aseguran que no hubo eventos sospechosos, Agüero ingresó en el Hospital Materno Neonatal de Córdoba en diciembre de 2020. Según reporta el diario La Voz, la enfermera de 27 años tiene un currículum impecable.
De pericia extrema y con una prolijidad inigualable, los testimonios de sus compañeros de trabajo aseguran que Agüero llegaba temprano al Hospital: hasta una hora y media antes. “Siempre estaba sonriente”, aseguró un colega al diario La Voz.
“Estaba formada para hacer lo que hizo, no hay forma de que haya sido mala praxis, fue adrede”, dijo a este diario un funcionario de Salud que participa de la investigación. La sospecha que recae sobre ella es que le inyectó una sustencia no identificada a 13 bebés. Cinco de ellos murieron y el resto quedó con lesiones graves como necrosis, hematomas y heridas muy visibles.
Con carrera en el Instituto SEP San Nicolás, el gremio de los empleados estatales, Agüero vive en Río Ceballos y no tiene hijos. Sus jefes le habían pedido que se tomara todas las vacaciones que tenía disponibles, y luego la dispensaron. Es decir, la desafectaron de prestar servicio, pero estaba obligada a presentarse cuando fuese citada por el hospital para prestar declaración testimonial.
En sus redes sociales vivía subiendo cosas de enfermería, obstetricia y más. El lunes pasado cerró la cuenta, en lo que pareció un adelanto de lo que fue hoy: la detención e imputación de la enfermera de 27 años.
