El desempleo llegó al 7,1% en el tercer trimestre de este año, según informó este miércoles el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC). El índice aumentó 0,2 puntos porcentuales respecto de los tres meses anteriores de 2022 que registraron una cifra de 6,9%.
A partir de las cifras del INDEC se desprende que alrededor de 1,59 millones de personas sufrieron la falta de trabajo durante julio, agosto y septiembre de 2022, cuando se profundizó el impacto del alza de la inflación.
En concreto, el dato de desempleo del tercer trimestre exhibió una baja de 1,1 puntos porcentuales con respecto al mismo lapso del año pasado que marcó un 8,2%. La tasa de empleo, por su parte, llegó a 44,2% y creció 1,3% en relación con el dato previo.
Nivel educativo y tiempo de búsqueda
En referencia al nivel educativo de las personas desocupadas, el 72,6% cuenta con secundario completo, en tanto, el 27,4% presenta estudios que corresponden al nivel superior y universitario, completo o incompleto.
En cuanto al tiempo de búsqueda laboral el 61,1% lleva buscando empleo entre 1 y 12 meses, mientras que el 38,3% lleva más de un año.
Por otra parte, también se indicó que para la población de 14 años y más, la tasa de desocupación afectó más a las mujeres, donde el desempleo llegó al 7,8%, mientras que en el caso de los hombres fue del 6,5%.
Otro de los datos que informa el INDEC es la tasa de actividad, es decir, la cantidad de gente económicamente activa sobre la población total. Ese dato expresa cuántas personas trabajan o buscan trabajo.
En el tercer trimestre, la tasa de actividad subió 1 punto porcentual de acuerdo al cálculo interanual y alcanzó al 47,6% de la población, mientras que la cifra fue de 46,7% en el mismo período del 2021.
La población económicamente activa (PEA) es de 13.911.081 y está compuesta por los ocupados y los desocupados. Este último grupo presiona activamente sobre el mercado laboral en búsqueda de una ocupación y representa el 7,1%.
A fin de tener un indicador sobre la presión global, se suman los ocupados que, si bien tienen un empleo, buscan activamente otro (ocupados demandantes) y la cifra es de 7,6%.
En una gradación menor de presión laboral, se encuentran las personas ocupadas que no demandan activamente otro empleo, pero están dispuestas a extender su jornada de trabajo. Ejemplo de esto son los subocupados no demandantes y otros ocupados no demandantes disponibles que representan el 3,4% y el 2,8%, respectivamente.