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El fiscal pidió confirmar el procesamiento de Alberto Fernández por violencia de género

Solicitó que se mantenga la acusación contra el expresidente por agresiones a Fabiola Yañez. La defensa insiste en su sobreseimiento. El tribunal debe decidir

El fiscal pidió confirmar el procesamiento de Alberto Fernández por violencia de género

El fiscal ante la Cámara Federal porteña José Luis Agüero Iturbe pidió que se confirme el procesamiento de Alberto Fernández en la causa por violencia de género que involucra a la ex primera dama Fabiola Yañez. La solicitud fue presentada ante la Sala II de la Cámara Federal, que realizó una audiencia previa para evaluar la situación judicial del exmandatario.
 

El planteo de Agüero Iturbe se basó en que los elementos recolectados hasta el momento permiten "tener por acreditada la responsabilidad del nombrado en orden a los hechos" por los que fue imputado. En contraposición, la abogada de Fernández, Silvina Carreira, exigió el sobreseimiento y desestimó las acusaciones.

Los jueces Roberto Boico, Eduardo Farah y Martín Irurzun quedaron en condiciones de resolver si confirman el procesamiento dispuesto el 17 de febrero por el juez federal Julián Ercolini. En esa decisión, Ercolini acusó a Fernández como "autor penalmente responsable de los delitos de lesiones leves agravadas por haberse cometido en un contexto de violencia de género y contra su pareja, reiteradas en dos oportunidades; lesiones graves agravadas por haberse cometido en un contexto de violencia de género y contra su pareja; y amenazas coactivas". Además, dictó un embargo de diez millones de pesos sobre los bienes del ex presidente.

Según la resolución judicial, los hechos habrían ocurrido durante la relación entre Fernández y Yañez, desde 2016 hasta el 6 de agosto de 2024. La exprimera dama declaró en el expediente a través de una videoconferencia desde Madrid, donde reside junto a su hijo Francisco.

En su fallo, Ercolini destacó que la relación estuvo marcada por una "asimetría de poder" y sostuvo que la violencia ejercida "habría adquirido un carácter habitual y continuo". Según la investigación, el expresidente golpeó en dos ocasiones a Yañez en la Quinta de Olivos, causándole moretones en el ojo y el brazo derecho, además de amenazarla para que no presentara la denuncia.

La defensa de Fernández cuestionó la decisión judicial alegando "vaguedad de la imputación" y "contradicciones en las circunstancias temporales de los hechos". También criticó la negativa a acceder al teléfono celular del exmandatario, secuestrado al inicio de la causa. Además, Carreira argumentó que los hematomas de Yañez eran producto de caídas relacionadas con un presunto problema de consumo de alcohol.

El fiscal Agüero Iturbe desestimó esos planteos y reafirmó la solidez del procesamiento. "Las reflexiones contenidas en los distintos pasajes del auto de mérito apelado constituyen sustento argumental suficiente", sostuvo. Agregó que la defensa solo expresa "un desacuerdo con lo decidido" y pidió que la apelación sea rechazada.

Ahora, la Cámara Federal deberá definir si ratifica el procesamiento de Fernández, lo revoca o lo modifica. Si lo confirma, el expresidente podría ser enviado a juicio oral.


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