La Federación de Empleados de Comercio y Servicios (FAECYS), que representa al gremio más numeroso del país, logró cerrar un nuevo acuerdo paritario con una suba salarial que llevará el salario básico a $1.123.000, incluyendo el presentismo.
El incremento pactado alcanza un 5,4% que se distribuirá en tres tramos mensuales: 1,9% en abril, 1,8% en mayo y 1,7% en junio.
A esto se suma el pago de sumas fijas no remunerativas por un total de $115.000, repartidas de la siguiente manera: $35.000 en abril, $40.000 en mayo y otros $40.000 en junio. Esta última cuota será incorporada al sueldo básico en julio.
El entendimiento fue rubricado entre FAECYS y las entidades empresarias del sector: la Cámara Argentina de Comercio (CAC), la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) y la Unión de Entidades Comerciales (UDECA).
Este nuevo acuerdo mejora el anterior, que había establecido una suba del 5,1% entre enero y marzo, con un básico de $1.050.000.
“Nuestro compromiso es sostener el poder adquisitivo frente a una inflación que aún no cede. Este acuerdo es parte de un seguimiento permanente que hacemos para resguardar el ingreso de los trabajadores”, afirmó Armando Cavalieri, titular de FAECYS.
Sin embargo, el dirigente también expresó preocupación por la evolución del empleo en el sector comercial: “observamos con atención signos de desaceleración que nos inquietan”.
El aumento negociado se ubica por encima del 1% mensual que propone el Gobierno como pauta, un límite que es rechazado por los sindicatos y que, además, queda por debajo de la inflación acumulada en los primeros meses del año.
En marzo, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) fue del 3,7%, mientras que en enero y febrero había registrado subas del 2,2% y 2,4%, respectivamente.
La resistencia sindical a un techo paritario del 1% ya se había hecho sentir semanas atrás. Desde distintos sectores anticiparon que los acuerdos firmados serán de corto plazo y con cláusulas de revisión: “Ese tope ya no corre más”, advirtieron.
En el sector privado formal, los sueldos cayeron un promedio del 3% en el primer trimestre, según datos de la Fundación Capital. A eso se suma la incertidumbre por la posible aceleración inflacionaria tras el levantamiento del cepo cambiario, lo que podría forzar nuevas negociaciones salariales.
En este contexto, la Confederación General del Trabajo (CGT) prepara una movilización para este miércoles, en la antesala del Día del Trabajador, en rechazo a las políticas económicas del Gobierno.