El Ejército Argentino vuelve a estar en el ojo de la tormenta. Una investigación interna del Ministerio de Defensa reveló serias irregularidades en el manejo de repuestos y recursos en el Batallón de Abastecimiento y Mantenimiento 601, ubicado en Campo de Mayo. La denuncia fue elevada a la Justicia Federal ya la Oficina Anticorrupción.
Entre las irregularidades detectadas, destacan la donación no autorizada de motores de aeronaves Twin Otter, un evento social sin presupuesto y contradicciones en la documentación de un avión Diamond. También se investiga la entrega irregular de camillas de helicópteros a civiles y sospechas sobre pagarés.
El ministro de Defensa, Luis Petri, ordenó la suspensión de 17 militares y el relevo de un jefe como medidas disciplinarias. Además, designó un auditor para aclarar responsabilidades y posibles delitos.
Las autoridades militares colaboran en el proceso. El sujeto del Estado Mayor General del Ejército y la Dirección General de Asuntos Jurídicos tomaron acciones inmediatas para verificar las denuncias y evitar obstrucciones a la investigación.
Este caso se suma a otros escándalos recientes, como la denuncia por extorsión del general Jorge Berredo y la destitución del jefe de la Fuerza Aérea. La opinión pública observa con atención las acciones del gobierno para combatir la corrupción en las Fuerzas Armadas.
