Una violenta situación alertó a los vecinos de Avellaneda este viernes por la tarde. En pleno centro de la localidad bonaerense, un joven de 19 años recibió seis disparos luego de reclamar por el arreglo de su celular. Debió ser operado y se encuentra estable.
Todo comenzó en una barbería ubicada en avenida Belgrano y 9 de Julio. Allí, Ramón, la víctima, se encontraba con dos amigos cuando al lugar llegó otro joven a quien le reclamó por un arreglo fallido de su teléfono.
Esto generó una discusión entre los dos hasta que, finalmente, el reparador se fue del negocio. Sin embargo, a los pocos minutos regresó a bordo de un auto Peugeot 206 color gris junto a su padre.
El lugar del ataque. (Foto: Google Street View)
En ese momento, el hombre de 46 años sacó un arma de fuego y amenazó a Ramón. Tras un intercambio de palabras, el joven y su padre se fueron del lugar, pero cuando la víctima y sus amigos abandonaron la barbería, fueron interceptados a 100 metros.
Fue allí cuando el sujeto se bajó del vehículo y le efectuó seis disparos al chico de 19 años. La víctima huyó del lugar, pero a cuatro cuadras, en la esquina de avenida Mitre e Italia, cayó malherido: tenía cinco impactos de bala en el tórax y uno en el pómulo.
Por su parte, sus dos amigos escaparon del lugar y los agresores se dieron a la fuga. La víctima debió ser trasladada de urgencia al hospital Fiorito donde lo operaron y se encuentra estable.
La detención del acusado
Tras el ataque, efectivos del Grupo Táctico Operativo (GTO) de esa seccional recabaron testimonios y material aportado por el Centro Operativo de Monitoreo (COM) Avellaneda. Gracias a ello lograron establecer el domicilio del agresor, ubicado en la calle Reconquista al 1500 de Gerli, según informó Télam.
Durante varias horas montaron una vigilancia en la zona y lograron divisar al Peugeot 206. A pocas cuadras lograron interceptarlo y dieron con el hombre de 46 años quien conducía el vehículo y se trasladaba junto a familiares.
En el lugar, la policía requisó el auto y encontró la riñonera en la que el acusado llevaba el arma al momento del ataque. Es por ello que la ayudante fiscal Analía Sosa, quien está a cargo de la investigación, dispuso el allanamiento de urgencia en la casa del acusado donde se secuestró un revólver calibre 32, marca Tiber y sin numeración, aunque no es el que utilizó en el ataque.
El hombre quedó detenido y, de acuerdo a lo informado por los investigadores, no tiene antecedentes aunque sí una denuncia por amenazas. Sus vecinos aseguraron que se trata de una persona conflictiva y agresiva.
Está acusado por el delito de “homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa”. Por otra parte, la fiscal intenta determinar la participación del hijo del detenido ya que la víctima declaró que ambos le dispararon.
Personal de la comisaría 1ra. de Avellaneda trabajó en el lugar y la causa quedó en manos de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) del Departamento Judicial de dicha localidad.
