La Justicia de Estados Unidos dejó en firme un fallo que condena a la Argentina a abonar casi 400 millones de dólares por la estatización de Aerolíneas Argentinas en 2008. Se trata de un fallo de una Corte del distrito de Columbia que ordenó a Argentina pagar 390,9 millones de dólares por la expropiación de la línea de bandera en el año 2008.
El beneficiario del fallo es el fondo Titan Consortium, titular del juicio por la expropiación de Aerolíneas y que en el mes de octubre había pedido que se ordene al país a abonar el pago establecido por el CIADI, el tribunal de arbitrajes del Banco Mundial,que todavía permanece impago.
El acreedor de la deuda que tiene el país le adquirió el caso a Burford Capital el 15 de marzo de 2018, que a su vez redefinió su estrategia contra Argentina para concentrarse en la causa por la renacionalización de YPF en 2012.
Burford, a su vez, le había adquirido en 2015 la causa al tribunal español donde se cursaba el expediente por la quiebra del grupo español Marsans en unos 17 millones, a lo que se agregó, en consecuencia, una demanda contra Argentina por la renacionalización de 2008. Titan argumenta que Argentina no pagó lo ordenado por el CIADI, un fallo que no es apelable, por lo que esta orden de la Corte es definitiva.
A mediados de noviembre, los abogados del país y los demandantes habían llegado a un acuerdo "sobre los términos y condiciones de la sentencia en el caso expropiación de Aerolíneas".
El acuerdo permitía que la Justicia de Estados Unidos se expida, en lo que se denomina sentencia final, sin pasar por un juicio y que, ante el incumplimiento del condenado, se activaría de manera directa el inicio de procesos de embargo hasta cubrir el total de la sentencia.
Peligro de embargos
Si bien la Argentina había rechazado en una primera instancia los argumentos que había presentado Titan Consortium en la causa, esto no tuvo un efecto positivo y un tribunal estadounidense determinó que la sentencia debía ser ejecutada. Ahora Argentina debe hacer frente, indefectiblemente, al compromiso o, en caso contrario, el acreedor estará en condiciones de iniciar los embargos pertinentes para cobrar el total de la deuda.
"Miren lo que cuestan la genialidades de los estatistas y todavía hoy el gobernador de Buenos Aires sigue insistiendo en ese camino, la verdad que deberíamos concretar la idea de Javier Milei: crear el impuesto Kicillof, así lo pagan los adoradores de ideas ridículas que le cuestan fortunas al país", expresó el secretario de Transporte, Franco Mogetta, desde sus redes sociales.
En el Gobierno de Cristina
La reestatización de Aerolíneas Argentinas fue reglamentada por el Gobierno de Cristina Kirchner el 17 de diciembre de 2008, luego que la Cámara de Diputados convirtiera en ley el pedido de la entonces jefa de Estado de avanzar en esta operación bajo el argumento de tratarse de empresas "de interés público nacional".
En ese momento la ley abarcaba a Aerolíneas Argentinas, Austral Líneas Aéreas, Jet Pack, Optar y Aerohanding.
Por la reestatizacion de Aerolíneas Argentinas, el país no pagó un solo dólar, lo que fue advertido por el fondo Buitre Burford, que le compró a Díaz Ferrán, titular de Marsans, los derechos para iniciarle juicio a Aerolíneas ante el CIADI por la forma en que se concretó la nacionalización de la empresa.
"Es ridículo es querer liquidar Aerolíneas"
El ex presidente de Aerolíneas Argentinas Pablo Ceriani apuntó contra el jefe de Gabinete, Guillermo Francos y afirmó que "ridículo es querer liquidar" la línea aérea de bandera, a la vez que apoyó al gobernador bonaerense, Axel Kicillof.
Desde su cuenta personal de la red social X, Ceriani tomó las palabras de Francos contra Kicillof cuando aseguró que si "pretende asumir la deuda" de la empresa aérea estatal sería "una cosa absolutamente desproporcionada y ridícula".
"Desproporcionado y ridículo es querer liquidar Aerolíneas por dogmatismo ideológico, Guillermo Francos. Nosotros queremos sostenerla para proteger los intereses y el desarrollo de la Provincia", sentenció Ceriani.
Asimismo, reveló números de FlyBondi acerca de las cancelaciones realizadas durante el mes pasado cuando, según dijo, anuló "casi 140 vuelos, sin ningún tipo de protección" hacia los pasajeros que utilizan sus servicios. "Esta es la política desreguladora que nos propone el Gobierno: empresarios ineficientes e irresponsables, pasajeros desprotegidos y Estado ausente", indicó.
Destacó que el tema de las cancelaciones es "otra gran diferencia entre empresas como FlyBondi y Aerolíneas Argentinas" porque si la línea de bandera tiene que cancelar un vuelo, "siempre responde ante sus pasajeros".