El cuerpo de Cecilia Strzyzowski aún no aparece, pero los detalles que surgen de la investigación judicial son cada vez más espeluznantes.
Según una fuente oficial con acceso a la causa, la hipótesis más certera que manejan los investigadores es que a la joven de 28 años la ahorcó su pareja, César Sena, de 19 años, el 2 de junio en la casa de sus padres, Emerenciano Sena y Marcela Acuña.
Luego, éstos habrían colaborado en la desaparición del cuerpo utilizando su red de empleados y propiedades. El cuerpo de Cecilia habría sido quemado y luego triturado a golpes, según surge de las declaraciones y las investigaciones realizadas hasta el momento en la causa. Esa sería la razón por la que no aparecen marcas de sangre en la casa del matrimonio Sena-Acuña y también la causa por la que aún no encontraron los restos de Cecilia.
Los únicos presuntos rastros de la joven que existen hasta el momento son una valija con rueditas quemada, anillos y collares, un dije en forma de cruz y huesos triturados del tamaño de una uña que aún no se sabe si son de ella. Todos estos elementos fueron encontrados en los últimos días en ríos y descampados que quedan en las inmediaciones de la finca de chanchos que poseen los Sena. Gloria Romero, la madre de Cecilia, mañana tiene una cita con los fiscales para reconocer los elementos. Si confirma que son de su hija, la causa tomaría una velocidad aún mayor al frenesí que adquirió en los últimos días.
Según la hipótesis más certera que maneja la fiscalía, César habría tomado por la espalda a Cecilia para luego ahorcarla presionando con el brazo sobre su cuello. Los intentos de defensa de Cecilia serían la explicación de las marcas muy compatibles con arañazos que César tenía en el cuello durante un acto de campaña en el Barrio Obrero de Colonia Elisa que se realizó al día siguiente, el sábado 3 de junio.
Un testigo de identidad reservada ya había aportado en la causa un chat con Cecilia donde ésta revelaba una agresión de César cuando ella quiso bajarse del auto durante una discusión. La agresión incluyó un ahorcamiento aplicando una maniobra de artes marciales. César practicaba artes marciales y deportes de combate.
Según esta hipótesis, los padres de César colaboraron en deshacerse del cuerpo mediante el traslado a la finca donde crían chanchos. Allí se habrían quemado, desmembrado y triturado los restos de Cecilia, para luego arrojarlos al río. En la causa hay colaboradores de los Sena imputados.
Uno de ellos, Gustavo Obregón, fue quien se quebró ante los fiscales y aportó una versión de dónde se habrían descartado los restos. El operativo con los datos de Obregón se llevó a cabo el martes en el río Tragadero, cerca del criadero de chanchos de los Sena. Buzos tácticos de la policía de Chaco hallaron al mediodía del martes los huesos triturados y otros elementos de relevancia, como el dije en forma de cruz que podría ser el que Cecilia llevaba siempre al cuello, incluyendo el día de su desaparición.
Obregón es una persona de máxima confianza del clan piquetero, a tal punto que hacía de chófer de César Sena cuando el joven iba al colegio secundario (se recibió en diciembre pasado). Está casado con Fabiana González, una empleada de Acuña que también fue detenida como partícipe del homicidio. Fuentes judiciales indican que habría confesado haber ayudado al joven a descartar el cuerpo de Cecilia. “Obregón dijo que descartó una bolsa con huesos triturados del tamaño de una uña”, explicó la fuente, con acceso a la causa.