La inflación de septiembre de 2023 se ubicaría por encima del 10%, de acuerdo con las proyecciones de analistas y consultoras privadas. De ser así, sería el segundo mes consecutivo en el que esto ocurra, luego de que la variación mensual del Índice de Precios al Consumidor se posicionara en un 12,4% en agosto, el número más alto en más de tres décadas
De acuerdo con Camilo Tiscornia, Director de C&T Asesores Económicos, el incremento mensual en el noveno mes del año se posicionaría "por encima del 11%", afirmó.
Con la misma proyección, con una pequeña desaceleración tras la marca más alta desde marzo de 1991, opinó Eugenio Marí, Economista Jefe de Libertad y Progreso. “Esto no es casual, ya que en las últimas semanas el Banco Central aceleró el ritmo de emisión de base monetaria. La consecuencia previsible es que la velocidad crucero de la inflación también sea más alta. A lo que se suma la caída en la demanda de pesos y activos en moneda nacional por la incertidumbre electoral”, remarcó.
Por su parte, la analista Natalia Motyl elevó en un punto esta estimación, posicionándola en un 12%, impulsada por las subas en la canasta básica alimenticia.
Cabe destacar que el rubro de alimentos y bebidas es el que, en lo que va del 2023, más ha sufrido el impacto de la inflación. Según el INDEC, desde enero los precios de los productos que integran este subgrupo se han incrementado un 67,3%, más que cualquier otro. Y el panorama de cara al último trimestre del año no es alentador en absoluto.
"Las fuertes subas registradas en los últimos meses en los rubros más sensibles a nivel social se dan por una serie de factores, como la incertidumbre macroeconómica, que genera retrasos en la provisión por parte de proveedores, hasta la falta de divisas para importar insumos. Por el lado de la demanda, hay un mayor consumo en productos más básicos que funcionan de cobertura en los estratos de ingresos más bajos ante contextos adversos. Todo esto presiona al alza por encima del promedio general", argumentó.
Levemente por debajo se hallan las proyecciones del economista Gastón Lentini, que aseguró que "puede contenerse en un 10%", y de Elena Alonso, quién consideró por su parte que el Índice de Precios al Consumidor que se publicará en las próximas semanas estará cercano al 8,5%, "similar a la inflación mayorista" publicada la semana pasada por el organismo.
"Se vieron los efectos de la devaluación post PASO sobre los tipos de cambio y como esto influyó en distintas áreas, como el precio de los combustibles, lo que se traduce en alzas en los precios", concluyó la economista del Grupo Broda.
Pero además de los analistas, fue el propio gobierno nacional el que fue publicando, en las últimas semanas, estimaciones preliminares sobre la inflación. Esto, a partir de la reciente disposición por parte de la Secretaría de Política Económica, que dirige Gabriel Rubinstein, de difundir todos los viernes un IPC semanal. Según el llamado "Índice Gobierno", el número final estaría, definitivamente, por arriba del 8% en septiembre. Aunque, en contraposición con las opiniones de los expertos, desde la entidad aseguran que se encuentra "en franco descenso".
Lo concreto es que, mas allá de las posturas y los argumentos, se puede vislumbrar que la tendencia sigue siendo preocupante y que el número de septiembre será una estela de lo que se pudo ver en agosto. Incluso en el mejor de los casos, las proyecciones son superiores al que, hasta el momento, es el índice más alto de un dígito registrado en el año: de un 8,4%, en abril.
