Este jueves se cumplen 14 años de la desaparición de Sofía Herrera en un camping de Río Grande. Desde aquel 28 de septiembre de 2008 muchas hipótesis surgieron, pero nunca tuvo grandes avances y recién en 2020 Interpol emitió un pedido de paradero sobre el principal sospechoso, pero nadie lo encuentra. Ahora, María Elena Delgado, la madre de la pequeña, se reunió con el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández y le pidió que sigan buscándolo.
Delgado relató cómo fue el encuentro que tuvo el pasado jueves con autoridades nacionales de la Secretaría de Seguridad y Política Criminal y otros familiares de menores desaparecidos. Allí fue donde reiteró el pedido de ADN a la adolescente sanjuanina que tiene un gran parecido a su hija, pero también para solicitar el paradero del ciudadano chileno José Dagoberto Díaz Aguilar, conocido como “Espanta la Virgen”.
“Les pedí que sigan buscando al nómade que está desaparecido y que no lo pueden encontrar por ningún lado”, explicó la mujer. “Es una persona que no tiene nada, solamente vive en los campos, cruza caminando de Chile a la Argentina y no lo pueden encontrar”, sostuvo indignada.
Además, remarcó que el ministro le prometió que lo van a seguir buscando y que será incorporado a la lista de los prófugos más buscados del país. También le dijo que “van a subir la recompensa” a quiénes aporten datos sobre el paradero de la nena.
Por qué Díaz Aguilar fue apuntado como sospechoso de la desaparición de Sofía Herrera
En 2020, el juez de Instrucción Nº1 de Río Grande, Daniel Cesari Hernández, brindó a la prensa imágenes oficiales que se encuentran registradas ante Interpol para la búsqueda de José Dagoberto Díaz Águila, alias “Espanta la Virgen”, el hombre que se vincula con la desaparición de Sofía Herrera.
El hombre es un jornalero de nacionalidad chilena nacido en Castro, zona de Chiloé, con DNI argentino y de 53 años de edad. Tiene antecedentes delictivos y fue señalado por dos personas como el principal sospechoso.
La pista surgió luego del megaoperativo ordenado por el juez en 2018 en zonas rurales y siguiendo dos caminos: el primero fue por el testimonio de un suboficial de la policía de la provincia que participó de las primeras búsquedas de Sofía. Él aseguró haber tenido contacto con el acusado, quien le dijo que “sabía dónde está Sofía”. En aquel momento la Justicia desestimó ese dato.
El segundo puntapié surgió por el testimonio de Néstor, un amigo de la familia que al momento de la desaparición de Sofía tenía seis años. Él compartió el camping John Goodall con ella y declaró haber visto a Díaz Águila. Gracias a su relato se logró elaborar el identikit para la búsqueda.
Néstor, que hoy tiene 20 años, hace dos fue citado nuevamente por el juez y ratificó su versión. “Ese hombre que se la llevó estaba en la ruta y nada que ver con el camping”, señaló.
“Mucho no me acuerdo porque pasaron bastantes años, sobre todo por la edad que tenía. Me acuerdo que habíamos ido a un día de camping con la familia y que pasó lo que pasó: en un momento salimos a buscar leña y Sofía se había apartado, yo fui con ella y pasaron todas las cosas”, contó a Radio Fueguina en 2020.
En el expediente figura qué es lo que vio, pero a los medios no dio más detalles. “La seguí y pasó lo del señor, no sé si decirle: ‘Señor, pasó tal cosa’ y yo fui a avisar. Fui desalentado. Era muy chiquito, tenía menos conciencia que ahora. Vi algo complicado”, sostuvo.
Además, aclaró que se sentía responsable por lo que sucedió. “Cargás con mucho porque sentís como un peso bastante grande, una culpa bastante grande. Ya no se puede arreglar. Son otros tiempos y pasó lo que pasó”, reconoció.