"La familia de Santino pide justicia", así comenzó una historia cargada de dolor. Agustina, madre de un chiquito de 4 años, denunció mala praxis en un hospital de San Miguel. "Yo lo traje a Santi el 2 de noviembre, porque empezó con fiebre. A las 12 de la noche levantó fiebre y a eso de las 3 vinimos", recordó.
Sin embargo, lo peor llegó al arribar al nosocomio de la localidad bonaerense —Hospital Dr. Raúl Lacarde—. ¿Qué ocurrió? Agustina recuerda que "primero vino una enfermera, pero no lo quería atender". Por otra parte, recordó: "La doctora me dijo que no le iban a dar nada porque tenía laringitis y que podía estar de cinco a siete días con fiebre".
Luego, la mujer rememoró que el chiquito volvió del hospital y comenzó con vómitos, tras estar varias horas sin ingerir ningún tipo de alimento. "Ahí ya estaba un poco más débil. Les cuento que Santi estaba en tratamiento preventivo por asma", contó.
Pero el nene seguía sintiéndose mal, la madre seguía pidiéndole a la doctora que le pusiera atención a su hijo. Pero hubo tres diagnósticos y ninguno pudo atender la gravedad del asunto. ¿La familia del menor? Desesperada tras horas con su nene en brazo agonizando.
"La doctora vino y me pidió perdón por haberse quedado dormida", fue el aberrante último testimonio que escuchó Agustina con su chiquito en brazos.
