Fuentes policiales informaron este miércoles que una niña de 4 años, identificada como Nayla, fue asesinada de un tiro en el pecho después de haber quedado en medio de una balacera donde hubo al menos 32 disparos. El hecho sucedió en el Barrio 1-11-14 del Bajo Flores porteño y una joven de 19 años también resultó herida en una pierna.
El lamentable suceso ocurrió alrededor de las 22 horas del martes 7 de febrero en el cruce de la calle Bonorino y Calle 10, donde, según los testigos, desde un automóvil Renault 19 color gris se efectuaron varios disparos a ocasionales transeúntes.
Según las fuentes del caso, fue el personal de Gendarmería Nacional apostado en la zona quien emitió un alerta ante el ataque a balazos y le informó a la Policía de la Ciudad que el automóvil de los tiradores había huido en dirección al vecino Barrio Presidente Illia.
En tanto, el personal policial que se encontraba trabajando en el Hospital Piñero reportó que al centro de salud ingresaron dos personas baleadas provenientes de la zona del ataque: la primera fue una joven de 19 años con una herida de bala, con entrada y salida, en una de sus piernas y sin riesgo de vida. La segunda fue Nayla, una niña de 4 años que llegó con un disparo en la región del tórax y más tarde falleció por la gravedad de la herida.
Del mismo modo, ingresó también una persona mayor de edad con una herida aparentemente de bala en la mano derecha, sin embargo, se estableció que provenía del Barrio Cildáñez y no guardaba relación con el hecho del Barrio 1.11.14, también conocido como Barrio Padre Rodolfo Ricciardelli.
En la zona donde se ejecutaron los disparos, los peritos recolectaron un total de 32 vainas servidas de calibre 9 milímetros.
En el caso interviene Eduardo Cubría, de la Fiscalía nacional en lo Criminal y Correccional 22, quien caratuló el hecho como homicidio. La fiscalía dispuso, además, la intervención de la División de Homicidios de la Policía de la Ciudad, para que tome las primeras declaraciones testimoniales en el hospital y en el lugar del ataque.
El dolor del padre de Nayla
El padre de Nayla, la nena asesinada en el Barrio 1-11-14, habló con TN. Según contó, el día del hecho la pequeña había salido a la vereda a jugar con sus hermanos.
En este sentido, el hombre explicó que él mismo había autorizado a los chicos, pero que se preocupó cuando escuchó las detonaciones.
“De repente veo a mi mujer corriendo de un lado para el otro, en medio de los tiros. Mi nena estaba agonizando en uno de los pasillos, con el tórax perforado por una bala”, dijo, angustiado, y le pidió al Estado que intervenga en la zona, ya que, según él, estos enfrentamientos son cosa de todos los días.
Además, el hombre contó que cuando se dieron cuenta de que la nena estaba herida, rápidamente la llevaron al hospital pero, desafortunadamente, falleció a los pocos minutos producto de las graves heridas.
“Es lo peor que le puede pasar a un padre”, aseguró el hombre. También pidió encarecidamente que se aceleren los trámites para poder velarla en familia y que la Justicia abra una investigación para poder llegar a dar con las personas que asesinaron a la nena a sangre fría.