Este lunes comienza el juicio por jurados contra los 11 imputados por la muerte de cinco bebés en el Hospital Neonatal Dr Ramón Carrillo de Córdoba.
La principal sospechosa en la causa es la enfermera Brenda Agüero, acusada de haberle suministrado grandes cantidades de potasio a 13 recién nacidos entre marzo y junio de 2022, lo que provocó la muerte de cinco. De todas formas, la Cámara Séptima -a cargo de Patricia Soria, Laura Huberman y José Cesano- y el jurado popular también juzgará a las autoridades del centro de salud y a funcionarios vinculados, como el exministro de Salud cordobés, Diego Cardozo.
La jornada empezará con la lectura de la acusación y una ronda de presentación de las partes, que durará aproximadamente 15 minutos. Luego, los acusados tendrán el espacio para declarar o abstenerse. Se espera que Agüero haga uso de este derecho y hable por primera vez.
En principio se creía que el juicio empezaría en el último trimestre del 2024, pero la fecha de inicio finalmente se confirmó en noviembre. En diciembre se seleccionó al jurado popular y se anunció el extenso cronograma que se desplegará hasta junio. En esa convocatoria, el tribunal presentó, a su vez, el croquis de ubicación para las partes y se acordaron reglas de comportamiento para un debate justo.
De acuerdo a lo que pudo saber, en enero se llevarán adelante cuatro audiencias semanales en el Tribunal II (lunes, martes, miércoles y jueves) de 9 a 16 y a partir de febrero serán tres por semana (lunes, martes y miércoles) en un horario similar. Además, pese a la presentación de las defensas para evitarlo, los 11 acusados deberán estar presentes en todas las jornadas.
La Cámara Séptima también estableció que el tratamiento sea por caso -definido con el nombre de pila de las víctimas: Francisco, Benjamín, Angeline, Melody e Ibrahim- para poder agrupar las audiencias y facilitar la convocatoria a testigos. Asimismo, se sumará el testimonio de la familia de los ocho bebés sobrevivientes.
“Tengo una mezcla de sentimientos. La angustia de remover todo, ir todos los días a los Tribunales. Va a ser demasiado pesado, pero es un proceso que tenemos que atravesar. Esperamos mucho esto”, expresó Vanesa Cáceres, mamá de Francisco, la primera víctima.
La misma aseguró que tiene todas las expectativas puestas a que se conozca la verdad de lo que pasó, aunque reconoció que van a ser jornadas muy movilizantes: “Tenemos contención psicológica desde el primer momento, pero nadie te prepara para encontrarte de frente con el asesino de tu hijo. Escucharlos, verlos, estar con ellos en la misma sala constantemente. Siempre trato de enfocarme en que me impulsen otros sentimientos que no sean bronca, todo esto lo hago por mi hijo y no por la descarga porque es muy tortuoso todo”.
Cáceres espera ansiosa escuchar la palabra de los exfuncionarios para poder terminar de armar el rompecabezas de responsabilidades. Respecto a Agüero, sostuvo: “No creo que ella reconozca lo que hizo. Pero a lo mejor nos sorprenda. No me gustaría escucharla, pero lo voy a tener que hacer aunque uno no termina entender estas mentes. Yo creo que nadie entendería por qué lo hizo”.
En la previa, Yoselín Rojas, mamá de Angeline, posteó un contundente mensaje en redes: “Ruego a Dios que este año se pueda hacer justicia y que todos los responsables paguen por el daño que te hicieron a vos y a los demás bebés inocentes que no pudieron defenderse de todos estos monstruos. Dános mucha fortaleza y consuelo a cada familia en estos momentos difíciles que estamos atravesando y que podamos hallar respuestas y justicia, que tanto esperamos”.
Muerte de los bebés en el Neonatal: cómo salió a la luz
Todo se destapó con la denuncia de un ingeniero que formaba parte del staff del hospital y que había tomado conocimiento -por el vínculo con personal médico- de algunas “muertes extrañas” que le llamaron la atención.
Al reportarlo, además de una investigación interna, comenzaron a realizarse allanamientos y cotejo de historias clínicas que buscaban el punto en común entre las diferentes víctimas. Cuando notaron las similitudes, se dieron cuenta de que no se trataba de algo aislado y comenzaron a afinar el análisis para intentar delimitar posibles sospechosos detrás de las muertes.
Se hizo un estudio exhaustivo para conocer en profundidad cómo había sido el embarazo, el parto y las horas posteriores al nacimiento de cada caso para determinar en qué momento y de qué manera habían ocurrido esas muertes y si efectivamente habían sido intencionales. En esa instancia, todos los relatos coincidían: eran madres sanas que parieron bebés sanos y que, según les dijeron en ese momento sin tantos detalles, habían tenido una falla en el corazón que les produjo el fallecimiento.
Además, se realizó un listado de todas aquellas personas que participaron en los casos para ver si se acercaban a un nombre. Fue entonces cuando las autoridades, pocos días después de conocerse la aberrante noticia, dieron un primer nombre: Brenda Agüero, una enfermera del hospital que había intervenido en todas las ocasiones.
“Las pruebas la indicaban como la persona que siempre estaba involucrada en los hechos, además se fueron sumando diferentes elementos que permitieron su detención”, explicó el fiscal de Instrucción Raúl Garzón.
Luego se exhumaron los cuerpos de dos víctimas y las autopsias mostraron altos niveles de potasio que los llevó a la muerte. “Se trataba de un factor exógeno, extraño, no compatible con una patología ni con una indicación médica”, indicó.
En ese sentido, se detectaron pinchazos en las espaldas o muslos posteriores de los bebés. La principal hipótesis indica que la imputada actuaba en la sala de recuperación sola y se cree que, por una cuestión de tiempos, mientras alzaba a los bebés los inoculaba con la ropa puesta.
Era una de las pocas personas que poseía acceso libre a ampollas sin tener que dejar registro de su retiro. Dictaron su prisión preventiva y continúa hasta el día de hoy detenida en la cárcel de Bouwer.
En busca de más elementos, peritaron su celular que reveló que la mujer de 28 años había googleado cómo dosificar potasio e insulina. También leyó en internet sobre técnicas de reanimación en menores, sustancias que generan paros cardíacos en bebés y un texto sobre cómo actuar durante el duelo por la muerte de un nene, entre otras cosas.
Cerca de 180 personas a brindaron testimonio y, tanto colegas como mamás de las víctimas, señalaron que la enfermera mostró especial interés por los bebés una vez que se descompensaron. Incluso, era la primera en advertir y notificar el estado de los bebés.
Mientras empezaba a armarse este macabro rompecabezas, hubo otras personas imputadas como el exministro de Salud cordobés y las autoridades del Neonatal por no haber denunciado los fallecimientos que permitieran realizar la autopsia judicial correspondiente en casos de muerte sin una causa natural.
A principios de 2023, se inició la elaboración de un perfil criminalístico y una pericia médica multidisciplinaria sobre los 13 casos que determinó cómo y por qué murieron los recién nacidos, basados en las autopsias, historias clínicas y pericias. Estos informes fueron fundamentales para ratificar que Agüero era el nexo común entre todas las víctimas y lo que permitió que la causa se elevara a juicio.
Uno por uno, todos los imputados en la causa
- Brenda Agüero: era enfermera y es hoy la principal acusada, señalada como la autora material e intelectual de las muertes. Por eso está detenida desde agosto de 2022 en el penal de Bouwer, imputada por “homicidio calificado por procedimiento insidioso reiterado en contexto de serialidad criminal por cinco hechos” (bebés que murieron a las horas de nacer) y “homicidio calificado por procedimiento insidioso reiterado en contexto de serialidad criminal en grado de tentativo por ocho hechos” (bebés que sobrevivieron a los ataques).
- Diego Cardozo: exministro de Salud de Córdoba. Renunció en agosto de 2022, días después de que se hiciera público el escándalo. Está imputado por “omisión de los deberes de funcionario público” y “encubrimiento agravado calificado por el hecho precedente y por su calidad de funcionario público”.
- Liliana Asís: exdirectora del Hospital Neonatal. Se encuentra con prisión domiciliaria desde mayo de 2023, pero está privada de la libertad desde febrero. Está acusada de “encubrimiento agravado”, “falsedad ideológica”, “omisión de deberes de funcionaria pública” y “encubrimiento por el hecho precedente” (homicidios en serie).
- Claudia Ringelheim: ex vicedirectora del Hospital Neonatal. Está imputada por “omisión de deberes de funcionario público” y “encubrimiento agravado calificado por el hecho precedente y por su calidad de funcionaria pública”.
- Alejandro Escudero Salama: ex vicedirector de Gestión Hospitalaria del Hospital Materno Neonatal. Está imputado por “omisión de deberes de funcionario público” y “encubrimiento agravado calificado por el hecho precedente y por su calidad de funcionario público”.
- Blanca Alicia Ariza: exjefa de Enfermería del Neonatal. Está imputada por “omisión de deberes de funcionaria pública” y “encubrimiento agravado calificado por el hecho precedente y por su calidad de funcionaria pública”.
- Pablo Carvajal: exsecretario de Salud. Está imputado por “omisión de los deberes de funcionario público” y “encubrimiento agravado calificado por el hecho precedente y por su calidad de funcionario público”.
- Alejandro Gauto: abogado y exsecretario de Legales del Ministerio de Salud. Está imputado por “encubrimiento agravado calificado por el hecho precedente y por su calidad de funcionario público”.
- Marta Gómez: exjefa de Neonatología del Neonatal. Está imputada por “falsedad ideológica”, “omisión de deberes de funcionaria pública” y “encubrimiento agravado calificado por el hecho precedente y por su calidad de funcionaria pública”.
- Adriana Morales: médica del Neonatal. Está imputada por “falsedad ideológica”, “omisión de deberes de funcionaria pública” y “encubrimiento agravado calificado por el hecho precedente y por su calidad de funcionario público”.
- María Alejandra Luján: neonatóloga. Está imputada por “omisión de los deberes de funcionario público” y “falsedad ideológica”.