Ezequiel Suárez, el hombre que violó una perimetral y asesinó a Jésica Domínguez en Córdoba, murió este sábado por la tarde luego de estar cuatro días internado tras intentar quitarse la vida.
Suárez estaba internado en el Hospital de Urgencias de Córdoba desde el pasado martes, cuando su hija de 13 años lo encontró malherido en la casa de su madre del barrio Villa Boedo, ubicado en la zona este de la ciudad.
La adolescente encontró a su padre con múltiples heridas de arma blanca en el cuello y en los brazos. A unos pocos metros estaba el cuerpo de su mamá, quien había sido asesinada unos minutos antes por el propio Suárez.
La escena había ocurrido ese martes alrededor de las 12, cuando el femicida violó una perimetral y evitó una orden de detención para meterse por el patio trasero de la casa ubicada en la calle Pedro Medrado al 5800.
El hombre forzó la puerta trasera de la casa y asesinó a la mujer de un disparo. Domínguez no tuvo tiempo de activar el botón antipánico que le había dado la Justicia por una denuncia contra su exmarido.
La teoría que manejaban los investigadores es que, una vez que cometió el femicidio, Suárez intentó quitarse la vida con un arma blanca que había en la casa. Aunque esa versión no había sido comprobada hasta este sábado.
La relación entre Domínguez y Suárez estuvo marcada por los numerosos episodios de violencia. Las constantes agresiones escalaron a tal punto de que a ella le asignaron una custodia policial y le dieron un botón antipánico. Mientras que a él le dictaron una restricción de acercamiento.
Las medidas judiciales continuaron con el paso del tiempo y fue justamente este fin de semana cuando se lanzó una orden de detención sobre Suárez. Incluso se llegó a realizar un allanamiento en su domicilio antes del ataque, pero nunca lograron atraparlo.
“Ese le pegaba a la mujer y le habían puesto una restricción, pero saltó por la muralla de mi hermana. Esa chica trabajaba y era muy buena”, relató una vecina de la víctima, según informó La Voz.
La fiscalía de Violencia de Género y Familia a cargo de Pablo Cuenca Tagle confirmó que la víctima había denunciado a su expareja tanto en 2022 como en 2023. En ambos casos la acusación era por violencia de género y familiar.
Suárez había respondido a esa denuncia con una contradenuncia en octubre de este año, luego de haber estado detenido. Según fuentes policiales, había estado preso durante un tiempo y en noviembre recuperó la libertad en una causa por violencia familiar que ya había sido elevada a juicio.