Tras un fin de semana de máxima tensión en las afueras del Congreso por los incidentes entre los manifestantes y los efectivos policiales, la ministra de Seguridad Patricia Bullrich defendió el protocolo anti-piquetes y aseguró que no tendrá "miedo de actuar", incluso frente a la posibilidad de que haya muertos en los operativos. "La Argentina está harta de los que no se animan a hacer las cosas por miedo", dijo en una entrevista radial este domingo.
En el marco de las definiciones sobre la Ley Ómnibus en Diputados, que culminó en la aprobación general del proyecto con 144 votos a favor y 109 en contra, los agentes de seguridad se enfrentaron con los agitadores fuera del Congreso con granadas, gas lacrimógeno, gas pimienta y bastonazos. Los manifestantes, por su parte, acudieron a incendios, lanzamiento de piedras y botellas. Los incidentes duraron tres días.
Bullrich defendió la aplicación del protocolo, que culminó en la detención de 13 personas, entre ellos un menor: "Yo sé lo que estoy haciendo, lo estoy haciendo bien", dijo en diálogo con FM Milenium esta tarde. Al ser consultada por la posibilidad de que haya alguna víctima fatal, cuestionó: "¿Por qué va a haber un muerto? Con el tema del muerto, lo único que lográs es nunca hacer nada. El país del ‘no me muevo’. Así estamos. Yo no tengo miedo de actuar. Si tuviera miedo de actuar, no podría ser ministra de Seguridad".
Protocolo anti-piquetes: Bullrich negó la represión
Con el Congreso vallado, este fin de semana un despliegue de efectivos policiales avanzó hacia los manifestantes con gases y balas de goma para liberar las veredas que ocupaban en protesta por la aprobación del proyecto de ley "Bases". Los diputados opositores dentro del recinto pidieron frenar la sesión y acusaron de "represivo" el operativo.
Bullrich defendió: "Si en algún momento algunos diputados intentaron frenar la sesión y después catalogar de represión por lo que pasó, está muy lejos de saber lo que significa represión". Además, acusó a Máximo Kirchner y las agrupaciones "de la Izquierda y el kirchnerismo" de coordinar las agitaciones. "Van a romper lo que no pueden construir adentro. Eso no es democrático", alegó.
"Los (Myriam) Bregman, todos los que nos han salido a agitar, como los (Eduardo) Belliboni. Belliboni, que cada dos por tres se tira al piso, dice que lo tocaron. Si te metés en el medio de las fuerzas, que están con sus protecciones, puede pasar que te peguen en el mentón o puede que te hayas golpeado dos cuadras antes y hayas ido a la plaza a propósito", opinó la ministra.
Hubo 13 detenidos en los incidentes en el Congreso
Ley Ómnibus: los incidentes, tras la aprobación
Durante las tres jornadas del debate en la Cámara baja, los efectivos de las fuerzas de Seguridad cargaron contra manifestantes y los obligaron a retirarse de las calles en búsqueda de cumplir el protocolo antipiquetes que prohíbe la interrupción del tránsito durante las protestas.
Los militantes, en su mayoría de agrupaciones de izquierda, organizaciones sindicales y movimientos sociales, tuvieron varios choques con los miembros de la Gendarmería, la Policía Federal Argentina (PFA) y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) que tomaron parte en el operativo.
Los agentes de seguridad avanzaron en formaciones compactas contra la multitud que se había reunido en cercanías del Congreso y los obligaron a retirarse hacia la Plaza, con el apoyo de hidrantes y motos que realizaban maniobras para rodear a los manifestantes.
Los uniformados arrojaron gas pimienta a un grupo de jubilados que protestaban contra el proyecto de ley, mientras se escuchaban detonaciones en medio del avance de las fuerzas de seguridad. En tanto, los manifestantes se reagruparon en la Plaza y comenzaron a entonar consignas como "La patria no se vende".
Cerca de las 19 se registraron los primeros incidentes sobre la avenida Rivadavia, que comenzó a ser obstruida por manifestantes, sobre quienes avanzaron en distintas ocasiones las fuerzas de seguridad.
