Una violenta situación tuvo lugar en el Instituto Politécnico Superior de Rosario, en el contexto de las movilizaciones y tomas de varias facultades en el país por la falta de fondos públicos para la educación. En medio de una asamblea y clase pública, un estudiante fue agredido físicamente por un desconocido.
El incidente se produjo mientras los participantes de la asamblea discutían sobre las mociones propuestas, que incluían la realización de clases públicas durante los días de paro y la condena a las recientes detenciones de miembros de Amsafé y ATE.
Según declaró Mario Bortolotto, secretario administrativo de COAD y docente de la facultad, la discusión se intensificó luego de que un estudiante, supuestamente vinculado a una agrupación cercana al gobierno nacional, tomara la palabra con un discurso que varios consideraron provocativo.
Este estudiante negó la existencia de problemas presupuestarios en las universidades y calificó los reclamos como un montaje para atacar al gobierno.
En medio de esta intervención, otra persona irrumpió y agredió al estudiante. El tumulto fue controlado rápidamente por los docentes presentes, quienes destacaron que la Facultad de Ciencias Exactas nunca había presenciado un acto de violencia de esta magnitud.
Efectivos policiales llegaron al lugar y detuvieron a dos personas: el presunto agresor y otro joven que, según testigos, intentaba acompañar al primer detenido sin mostrar señales de agresión. La identidad de los detenidos no fue confirmada, y aunque se solicitó en repetidas ocasiones que se identificaran, las autoridades no proporcionaron sus nombres.
Bortolotto también señaló que nunca antes había visto un nivel de provocación como el que presenció en esta asamblea, y sugirió que podría haber una intencionalidad detrás del incidente. “Uno sospecha que hay una intencionalidad. Si hoy vemos que en toda la televisión de la Argentina aparece esa imagen, podemos reconocer que hubo un nivel de intencionalidad de generar un hecho”, comentó.
El conflicto por el presupuesto universitario continúa escalando en todo el país, y episodios como este reflejan la tensión creciente en las instituciones educativas.
