El juez Juan Carlos Maqueda se jubiló este viernes y la Corte Suprema comenzó a funcionar con apenas tres miembros, en medio de la interna en el cuerpo y las tensiones por la elección del sucesor.
A partir de hoy, el máximo tribunal de justicia del país quedó apenas con Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti, a la espera que se destrabe la designación de los candidatos del Gobierno, Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla.
La jubilación de Maqueda empieza automáticamente el domingo cuando cumpla 75 años. Ayer, el Gobierno suspendió el ingreso por decreto de Lijo y García-Mansilla.
La semana pasada, cuando ya se descontaba el inminente retiro de Maqueda, la Corte advirtió que podía funcionar con tres miembros y le envió un mensaje a Javier Milei y al resto del Ejecutivo nacional: con una sorpresiva acordada, el tribunal estableció que en caso de no haber consensos para alcanzar las mayorías, se podrán sortear magistrados para desempatar.
Luego de 22 años como miembro del alto tribunal, Maqueda se retiró este mediodía del Palacio de Tribunales en medio de un clima festivo que le rindió homenaje. En la entrada que da sobre la calle Talcahuano lo aguardaban periodistas, fotógrafos y camarógrafos.
Su familia dio el presente y el magistrado recibió muestras de cariño de empleados y custodios. Hubo música y sonaron melodías del cantante popular cuartetero “La Mona” Jiménez, cordobés como Maqueda.
Exdiputado y senador nacional durante antes de ser juez, Maqueda se despide de la función pública en medio de fuertes denuncias de Lorenzetti por haber -presuntamente- realizado designaciones irregulares en su última semana de trabajo.
Lorenzetti le reprochó a Maqueda no tener “ejemplaridad” y señaló que esa actitud “muestra una despedida con claudicaciones que sorprende”.
“Un triste final”, sentenció quien además libra una guerra interna con el actual presidente de la Corte, Rosatti.
Maqueda llegó a la Corte en 2002, propuesto por la presidencia provisional de Eduardo Duhalde tras la caída de Fernando De la Rúa. Fue legislador municipal, provincial y nacional, convencional constituyente en los tres niveles) y ministro de Educación de Córdoba.
Entre otros fallos, el juez originario de Río Tercero firmó los rechazos a recursos de la expresidenta Cristina Kirchner que habilitaron los juicios orales por las causas Pacto con Irán y Hotesur-Los Sauces.
