MÁS DE POLICIALES



¡ROBO DE BEBES EN SALTA!

Denuncia que le robaron su bebé recién nacido: le dijeron que nació muerto y jamás vio su cuerpo

Marcela Villarpando tiene 50 años. Cuando tenía 19 años dio a luz a un bebe, que según denuncia fue robado por el personal de salud que la asistió en ese momento.

Denuncia que le robaron su bebé recién nacido: le dijeron que nació muerto y jamás vio su cuerpo

Esta historia de terror y de dolor se remonta al año 1992, cuando Marcela Villarpando fue internada en el hospital San Vicente de Paul y vivió la peor pesadilla que puede sufrir una madre al dar a luz. Según denuncia 30 años más tarde, le robaron a su hijo y quiere encontrarlo.

En dialogo con Agenda/Salta, Marcela Villarpando detalló los momentos previos y posteriores al hecho: “esto paso un 16 de febrero, me dirigí al hospital con una tía y una sobrina, caminé con contracciones directamente para tenerlo”, arrancó explicando la mujer. Quien destacó que le costó tiempo entender lo que ocurrió realmente.

Según especificó, ese día llegó al hospital a las ocho de la mañana: “mi bebé nació a las 9.30, cuando nace se van callados con mi bebé, vi la cara de mi bebé, al rato me dicen que mi bebé nació muerto y me culpan porque no me había hecho los controles médicos”, algo que jamás fue comprobado.

Relató que, tras escuchar la terrible noticia, se sintió sola porque su marido se encontraba trabajando en una finca a kilómetros del lugar y no existían los celulares para avisarle. Solo contaba con el apoyo de su tía, quien paralelamente era la empleada de la obstetra que la atendió en el parto.

Arranca la pesadilla

Tras asimilar la perdida y sin poder creer lo ocurrido, soportó que los profesionales del hospital le dijeran que debía buscar un cajón para enterrar a su hijo sin mostrarle el cuerpo. Fue por el ataúd y agua bendita como lo marca su creencia religiosa, pero al querer retirar el cuerpo de la morgue en un primer momento, le dijeron que ya había sido enviado al cementerio.

Según relata, se fue hasta el cementerio local y solicitó la entrega del cuerpo para darle santa sepultura, pero en el lugar le dijeron que no recibieron ningún cuerpo esa semana. Ahí se encendieron las alarmas de Marcela Villarpando, regresó hacía la morgue del hospital y tras un leve cruce, un empleado le confirmó que no hubo ninguna entrada de ese cuerpo.

“En ese momento le pedí ayuda a la tía que me acompaño y ella me dijo ´si te dijeron que está muerto, está muerto”, explicó. Sospechosamente su tía era empleada de la obstetra y ella cree que por esto, su familia la hizo callar y fueron cómplices.

Explica que entró en shock y cree que tanto su tía, como otros familiares, junto a los médicos que la atendieron ese día, fueron cómplices del robo de su bebé. Además, remarcó que no denunció en ese momento porque tenía miedo y ahora con 50 años se siente con la valentía suficiente para hacerlo y puede aportar datos.

¿Hay más casos? ¿Existía un mecanismo siniestro de venta de bebes en el San Vicente de Paul?

Tras la viralización de su denuncia en un grupo de Facebook llamado ¿Dónde estás?, Marcela Villarpando, una madre que busca a su hijo robado hace 30 años, jamás imagino que sería contactada por otras cinco mujeres que pasaron por lo mismo. Es decir que fueron a tener a su bebé en ese nosocomio y les dijeron que habían nacido muertos.

Según detalla, la historia es la misma, mujeres jóvenes, vulnerables y sin el apoyo de alguien que luche por ellas y sus bebes, víctimas de un aparente sistema organizado para el robo sistemático de recién nacidos. Algo que de comprobarse desataría un verdadero escándalo en la provincia.

El apoyo del CONADI

En esta lucha que arrancó por redes social y que derivó en una denuncia efectiva en la justicia, Marcela Villarpando, recibió el apoyo de distintos sectores, donde sobresale la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad, más conocida como CONADI, quienes se contactaron y se pusieron a disposición de la salteña.

La CONADI será quien brinde su asesoría y orientación en este caso, y depende del Ministerio de derechos humanos impulsando la búsqueda de hijos e hijas de desaparecidos y de personas nacidas durante el cautiverio de sus madres, durante la última dictadura cívico-militar a fin de determinar su paradero y restituir su identidad.  

Si bien, el caso de Villarpando no corresponde al periodo más oscuro de la historia argentina, la Comisión Nacional, trabajara con igual ímpetu en la investigación del caso y tratara de llegar a la verdad, según explicó.

Treinta años después, sin el miedo que la contuvo de denunciar por tantos años y con el apoyo de toda la sociedad, ella está dispuesta a llegar hasta las últimas consecuencias. Según detalla, hoy tiene los nombres de los médicos que participaron del parto de la mañana del 16 de febrero de 1992, cuando arrancó su pesadilla y que hoy la tiene luchando por encontrar a su hijo.

 


¿Te gustó la noticia? Compartíla!