El pasado sábado, dos mujeres fueron detenidas tras un fuerte operativo en Rosario de la Frontera, luego del llamado de una víctima de trata de personas al 145. Finalmente, el martes, Julio Bavio, juez federal de Garantías 1, imputó a las acusadas.
Según expuso el fiscal general a cargo de la investigación, Eduardo José Villalba, una joven llamó y reveló que había logrado huir de una casa donde era obligada a prostituirse, situación que sucedía también con otras víctimas.
Tras el llamado, se activó el protocolo que permitió poner a salvo a la denunciante y detener a las responsables, que son dos mujeres con un amplio historial de denuncias por delitos de amenazas, algunas de ellas con uso de armas.
El fiscal detalló que la víctima había sido capturada en Buenos Aires, a través de un supuesto tour de compras hacia la ciudad de Rosario. Sin embargo, nunca llegó a ese destino, sino a una casa ubicada en Rosario de la Frontera, donde fue retenida contra su voluntad, le quitaron su documento y le rompieron su celular.
Además, manifestó que el lugar contaba con "protección policial" e incluso, algunos policías eran clientes de los servicios sexuales que ofrecían las acusadas.
Por último, explicó que las jóvenes convencieron a las acusadas sobre un cliente que debían atender en un motel, lo que significaba un ingreso de dinero mayor. Allí, les permitieron salir de la casa y lograron escapar para refugiarse en un domicilio vecino y realizar la denuncia./Fm Profesional
