Cuatro personas fueron demoradas en el interior de un motel alojamiento ubicado sobre ruta 26, luego que la encargada del lugar a las 3.50 de la madrugada llamara a la policía porque desde una de las habitaciones partía un lastimero y sostenido llanto de bebé.
La empleada del motel aseguró a la emergencia que había establecido que los llantos se escuchaban desde el interior de la habitación 8 y que en ella se encontraban dos parejas: dos hombres y dos mujeres de entre 23 y 24 años.
Una patrulla de la subcomisaría de villa Lavalle acudió en el acto y personal de otras divisiones llegaron hasta allí, rodeando todas las salidas del motel alojamiento.
De esa manera un joven de 23 años atendió a la policía y reconoció la presencia del bebé en el lugar, dando explicaciones poco atendibles para la hora, el lugar y las circunstancias impropias para la presencia del bebé.
El hecho está fechado en la madrugada del día jueves, a las 3.50, cuando el personal del 911 recibió el llamado de la encargada del motel "El Castillo", ubicado sobre la ruta provincial 26, en la zona sudeste de esta capital.
La mujer alertó que en unas de las habitaciones lloraba un niño de manera sostenida y lastimera y solicitó la presencia de la policía de manera urgente.
La encargada dijo que al comunicarse con la habitación 8 para pedir -por favor- que la dejen libre porque el tiempo pactado ya había finalizado escuchó "llorar desconsoladamente a un bebé" sin ninguna explicación de los allí alojados.
La mujer hizo corroborar lo que escuchó con el personal de mucamas y de allí, protegiendo al menor, llamó a la fuerza pública.
Personal de la subcomisaría Lavalle y móviles del Centro Comando Operativo llegaron en gran despliegue, verificando que en la habitación de marras había cuatro mayores de edad, dos mujeres de 23 y 25 años y dos hombres de 23 y 26 y un bebé de pecho.
Una de las parejas -a la llegada de la policía- ya estaba en el interior de un auto con el bebé llorando. Los otros mayores aún seguían ocupando la habitación. Se estableció que las mujeres involucradas son hermanas y en su defensa explicaron que el bebé se quedaba en el vehículo mientras se turnaban para el uso de la habitación. Inmediatamente la policía dio intervención a la Justicia y la misma ordenó que se "demore a los involucrados, hasta obtener y corroborar la relación parental con el menor", solicitando los "antecedentes detallados de todos los adultos" y la intervención de Juzgado de Menores.
Por ese motivo la noche para estas personas terminó en una comisaría. Por el momento no hubo información acerca del temperamento que tomó la fiscalía actuante en este moralmente doloroso incidente.