En esta nueva etapa de la investigación del caso María Cash, el perfilamiento psicológico que se hizo del camionero Héctor Romero, acusado de haber asesinado a la diseñadora, se convirtió en una pieza fundamental. Fuentes señalaron que es "contundente".
El trabajo fue realizado por Natalia Colombo, jefa de psicólogos del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF), quien lleva más de dos años analizando a Romero desde que se decidió poner nuevamente el foco en el "minuto cero" de la desaparición de la joven deseñadora, quien fue vista por última vez el 8 de julio de 2011 . Según fuentes judiciales, el informe es "lapidario" sobre el posible accionar que tuvo Romero contra Cash. El hombre está imputado de homicidio agravado por alevosía, ya que consideran que se habría aproevechado del estado de vulnerabilidad de María Cash.
Romero ha sido una figura central en esta etapa de la causa, especialmente por algunos detalles revelados en sus declaraciones. En testimonios anteriores, mencionó recordar detalles de María Cash "de la cintura para abajo", además de hacer referencias a "olores" que quedaron grabados en su memoria. Sobre la vestimenta llamó la atención la descripción, ya que desde la cabina del camión la tendría que haber visto desde arriba hacia abajo.
"Cada una de sus palabras fue analizada en detalle, junto con su conducta y el contexto en el que se encontraba en ese momento. Estos elementos son clave para entender sus posibles implicancias en el caso", explicó una fuente.
Las contradicciones en las declaraciones de Romero son imposibles de ignorar. En su testimonio inicial afirmó que dejó a María en Palomitas, antes de llegar a la Difunta Correa. Luego aseguró haberla dejado en diagonal al lugar, y finalmente, años después, indicó que la dejó directamente en la Difunta Correa.
El trabajo de Colombo también incluyó una revisión exhaustiva de las pruebas materiales relacionadas con Romero, conversaciones telefónicas, relaciones laborales y hasta cuestiones de salud. Todo esto permitió trazar un perfil que, según los investigadores, es consistente con los elementos del expediente, que ya cuenta con más de 100 cuerpos y una decena de cajas de evidencia.
La psicóloga Natalia Colombo estuvo presente desde el inicio de esta nueva etapa, cuando la Justicia federal decidió retomar la causa y centrarse nuevamente en la zona donde María Cash fue vista por última vez hace más de dos años. El perfil psicológico de Romero busca no solo establecer posibles vínculos con el caso, sino también interpretar sus contradicciones a lo largo de los años.
Este enfoque ha permitido revalorizar aspectos de la investigación que antes habían sido pasados por alto. Por ejemplo, sus patrones de conducta tras la desaparición, su comportamiento en situaciones de presión y las inconsistencias en sus declaraciones previas.
El caso de María Cash ha sido emblemático no solo por las incógnitas que lo rodean, sino también por las críticas al manejo inicial de la investigación. Desde hace dos años la causa fue revitalizada, con la participación de especialistas, análisis psicológicos y el testimonio de testigos como Ramón Crespín, quien aportó detalles que volvieron a poner el foco en Romero. Crespín dijo que jamás vio a Cash ni al camionero en la zona de la Difunta Correa, en la ruta 9/34.
A su vez, la reconstrucción de las últimas horas de María Cash en la zona cero se complementa con el análisis de las pruebas forenses realizadas en los últimos años. Entre ellas se destacan los registros de impacta de sus dos líneas de celulares, que ubican al camionero en áreas claves al momento de la desaparición. Estas pruebas, junto con el perfil psicológico, conforman el eje de una causa que lleva adelante el fiscal federal Eduardo Villalba.
Romero fue detenido la semana pasada y permanece alojado en la sede de la Policía Federal. Allí incluso fue asistido ya que tiene cáncer de próstata.
La investigación por la desaparición de María Cash dio un vuelco hace dos años gracias a un convenio firmado entre el Ministerio Público y la Fiscalía Federal, que permitió la incorporación de investigadores especializados.
Según fuentes, este proceso de investigación fue "geológico". La metáfora refleja la necesidad de destapar capa tras capa para llegar a los hechos concretos en medio de una maraña de información falsa.
A lo largo de los años, más de 400 supuestos avistamientos de María Cash fueron reportados, muchos de ellos en lugares tan dispares como Croacia, Paraguay, Brasil y Colombia. En Argentina, hubo quienes afirmaron haberla visto en Rosario de la Frontera, Jujuy, Tucumán y otras localidades, desviando constantemente la atención de los investigadores.
El camionero Héctor Romero, ahora acusado formalmente, estuvo por años fuera del foco de la investigación debido a las numerosas distracciones generadas por los falsos avistamientos y testimonios.
