La sorpresiva presencia de un hombre mayor en la comisaría de Campo Santo, manifestando haber reconocido la ropa que fue encontrada por la policía en una represa de riego, ubicada en el interior de una finca perteneciente a la familia Cornejo, en El Bordo, puso un manto de luz a una situación de misterio, que se generó a raíz de haber encontrado las prendas de vestir cerca del espejo de agua, pero sin dar con el paradero de su dueño.
Cuando en la comisaría de Campo Santo se recepcionó el pasado miércoles por la mañana una llamada telefónica, dando a conocer sobre la presencia de una persona que ingresó el día anterior a la finca, tomando dirección hacia la represa de agua, sin que se haya registrado su salida, se ordenó el envío de personal policial para que fuera a verificar esta denuncia. El personal, al llegar hasta el lugar mencionado, encontró en la orilla de la represa un buzo, un pantalón y un par de zapatillas, sin la presencia de una persona que justificara la existencia de esas prendas de vestir, por lo que supusieron que el dueño de las prendas podría haber ingresado a la represa y haberse ahogado. De inmediato se dio intervención a la Fiscalía de Gral. Güemes, ordenándose un rastrillaje hasta encontrar el cuerpo de la presunta víctima. Tras 10 horas de rastrillaje por dentro y por fuera del agua, contándose con la colaboración de personal de la Policía Lacustre y Bomberos Voluntarios, se notificó el resultado negativo de la operación.
El jueves por la mañana, desde la subcomisaría de El Bordo, se preparaban para registrar una vez más el lugar, pero no fue necesario, debido a que una persona mayor se presentó en la comisaría de Campo Santo, informando que su hijo era el dueño de la indumentaria encontrada cerca de la represa, "nos dijo que su hijo padecía de esquizofrenia, que seguramente se sacó la ropa en un brote que pudiera haber tenido cuando se encontraba en la finca, también nos dijo que su hijo ese mismo día regresó a su hogar, no estaba desnudo, aún tenía una remera y su ropa interior. También su padre nos informó que estaba bien y que se encuentra bajo tratamiento", explicó el comisario Juan Carlos Tapia.
El padre del joven afectado por una enfermedad psíquica, con residencia en barrio San Antonio de Campo Santo, también explicó por qué no se hizo presente antes, "no vino ese mismo día para aclarar la situación porque no sabía que a la persona que buscaban en la represa era a su hijo, se dio cuenta de quién se trataba cuando reconoció la ropa en las fotos publicadas por la policía", manifestó el comisario Tapia. Corroborados los dichos del denunciante, se procedió a la entrega de la ropa, debido a que no hubo delito, más allá de haber ingresado a una propiedad privada.
