El hombre de 37 años reconoció en la audiencia de juicio abreviado haber cometido los delitos de lesiones doblemente agravadas por ser cometidas a una persona con quien mantuvo una relación de pareja y por un hombre a una mujer mediando violencia de género, amenazas y desobediencia judicial en concurso real.
Debido a que registraba antecedentes condenatorios fue declarado reincidente. Atento al tiempo que llevaba detenido se dio por cumplida la pena y recupero su libertad.
Carriqui se encontraba en estado de ebriedad cuando se presentó en el domicilio de su expareja, a quien comenzó a insultar desde afuera. Con el fin de tranquilizarlo, ella lo invitó a ingresar en la vivienda para recostarlo y que se le pasen los efectos del alcohol. Pero lejos de calmarse, el hombre continuó gritando, lo que hizo que se despierte la hermana de la mujer, que acudió a ayudarla.
Ante los pedidos de las dos mujeres para que haga silencio, el acusado se retiró del lugar, pero regresó. En ese momento, su expareja se retiraba del lugar con su hijo, a quien llevaba al hospital porque estaba enfermo, y él comenzó a golpearla. Sacó un cuchillo que tenía escondido y le provocó un corte en la mano. La hermana de la mujer se interpuso para defenderla, y también fue lesionada.
El acusado tenía prohibido acercarse a su expareja.