Para conservar la prisión en suspenso, durante tres años, el imputado deberá cumplir las siguientes reglas de conducta: realizar tratamiento psicológico para controlar su agresividad y alcoholismo y presentar las constancias correspondientes; prohibición de ejercer actos de violencia física o psíquica en contra de la damnificada; prohibición de acercamiento a la víctima, a su domicilio, lugar de trabajo y de concurrencia habitual en un radio de 500 metros; prohibición de mantener cualquier tipo de contacto con la denunciante, por cualquier medio, entre otras obligaciones.
El imputado fue denunciado por su pareja. La mujer refirió que en mayo de este año Díaz llegó al domicilio familiar, comenzó a agraviarla y luego la golpeó en los brazos y en la cabeza.
El juicio abreviado se llevó a cabo en la Sala II, presidido por la jueza interina Carolina Sanguedolce.