El hombre de 39 años fue considerado autor de los delitos de lesiones leves agravadas por mantener con la víctima una relación de pareja y el género.
Por cuestiones de dinero comenzó una discusión, que culminó con golpes del agresor en el rostro de la víctima. Los hijos de la pareja intervinieron en ayuda de su madre.
Durante dos años deberá fijar domicilio, no cometer nuevos delitos. Además tiene prohibido ejercer hechos de violencia de cualquier tipo hacía la víctima. En caso de incumplimiento, podría dejarse sin efecto la modalidad de la pena impuesta, que sería de cumplimiento efectivo.
También dispuso la extracción de muestras de ADN del condenado para su incorporación al Banco de Datos Genéticos.