La investigación inició en el mes de enero pasado, cuando una empleada denunció que mientras se encontraba en el local comercial ingresó un hombre y bajo amenaza con arma de fuego le sustrajeron la recaudación del negocio y su teléfono celular.
De las diversas averiguaciones realizadas, se pudo establecer que el teléfono sustraído habría sido vendido a un tercero por la pareja de la denunciante.
Por ello, habiéndose establecido que la denunciante faltó a la verdad en su declaración y al advertir que la pareja de la misma sería conocido en el ámbito delictivo, se solicitó al Juzgado de Garantías N° 5 autorización para allanar las moradas de los investigados.
Concretándose las medidas judiciales en domicilios ubicados en Rosario de Lerma y Campo Quijano, se logró la demora de los involucrados, el secuestro de dos estéreos y demás elementos vinculados a los ilícitos denunciados.
Por el hecho, la pareja implicada en el ilícito fue puesta disposición del Juzgado de Garantías N° 5.
