La mujer explicó que su hijo padecía retraso mental y epilepsia, y que al momento de haber salido del domicilio, faltaba una frazada.
Desde ese momento comenzaron varios operativos de rastrillaje por las zonas de Quebradas, la Ruta Provincial 133, entre otros lugares, hasta que el alerta fue dado el día 17 de mayo por un familiar.
Dijo que por un trabajo había salido a juntar chirimoyas y cerca de una zona de arbustos encuentra una cisterna abandonada y en el interior un cuerpo en avanzado estado de descomposición.
Al día siguiente llegó al lugar un médico legal, el Cuerpo de Investigaciones Ffiscales y criminalística.
Radio Salta informó en primicia que, de acuerdo a una evaluación, la muerte se produce por un paro cardiorrespiratorio a raíz de un traumatismo encéfalo craneano grave.
La justicia concluyó que no hay elementos que sugieran un delito y entregó el cadáver a los familiares.
Fue identificado como Tomás Vargas, de 29 años. Se presume que el hombre buscaba resguardo en la cisterna ante las bajas temperaturas y sufrió un accidente fatal.
Del operativo de búsqueda participaron efectivos de distintas áreas especiales de la Policía, de la División Canes, Bomberos, además de familiares y baqueanos.