En la denuncia, su padre contó que estaba en su casa cuando llegó su hijo en estado de ebriedad y drogado, insultando a toda la familia para que lo dejen entrar. Incluso pateaba la puerta y le decía que “te vas a cagar muriendo y yo voy ser feliz”.
El denunciante agregó que su hijo tiene problemas de adicción y un comportamiento violento y agresivo, lo que lo había llevado en varias ocasiones a denunciarlo.
Más tarde amplió la denuncia, y dijo que desde que se había ido de la dependencia policial, el acusado regresó a su casa, nuevamente se puso agresivo, por lo que llamó al Sistema de Emergencias 911.