En la localidad de Tartagal ya no saben que más hacer, apelar a las autoridades locales es apelar a la nada prácticamente, y desde las más bajas esferas políticas están cansados del mal manejo en términos de salud, es por ello que iniciaron el pedido de destitución al ministro de salud pública de la provincia de Salta. Para comentarnos el hecho habló con nosotros Nicolás Arce, concejal por la ciudad de Tartagal.
‘’No tenemos médicos, cada 2 meses viene un operativo antena a realizar las cirugías y operaciones’’ inicio lamentando el edil. La situación es desesperante, los habitantes deben de esperar a estos móviles sufriendo sus dolencias e incluso pereciendo en la espera. La otra opción es juntar mucho dinero para viajar a la Capital, e incluso muchas veces es la única solución, pues para chicos con trastornos del espectro autista no hay apoyo.
Hay faltante de cirujanos de urgencia, de infraestructura, y sobre todo de recursos humanos. ‘’Hay que ir a buscar profesionales a La Rioja, para que no les salga el nombramiento y se terminen volviendo’’ lamentó la situación el edil. En sus palabras, antes había 150 médicos, pero hoy no hay ni 50.
A partir de ello, se ha levantado un pedido de destitución al ministro de salud pública actual, Juan José Esteban. ‘’Necesito alguien que pelee’’ afirmó el entrevistado.
A falta de intendentes responsables, hace falta un ministro del interior
‘’Todos los políticos se han ido arrodillando al gobernador de turno’’ inició acerca de las intendencias en las zonas críticas, luego remarco la amplia carrera del intendente de Tartagal, con aproximadamente 10 años en cargos, pero que aun así nunca dio soluciones de nada.
Ante un pedido de informe, tardan meses en realizarlo, incluso llega a medias, por ello quedo contra las cuerdas, cuando las cosas no funcionan por las buenas hay que denunciar.
Ya que el ministro no está acorde a lo que es ser un ministro, exigen que se lo remueva, y desde el concejo bajo el pedido de un ministro del interior, que se preocupe por los reclamos del interior. Sin embargo, somos conscientes que esto parece una utopía, ya que actualmente están todos preocupados por su carrera política y no por los reclamos del pueblo.
