A metros del cementerio, en de Joaquín V. González, se levantaron dos asentamientos “Nueva Esperanza y Facundo Quiroga”, donde la gente convive con las tumbas desde hace muchos años. A raíz de esto vienen exigiendo al intendente Aguirre, la construcción de una tapia, para no tener tan presente a la muerte, los olores nauseabundos y la inseguridad que reina en el lugar.
Cabe aclarar que la gestión de Juanilo Aguirre está bajo la lupa desde hace años. El histórico intendente de Anta acumula muchísimas denuncias en su contra por varias irregularidades. La última fue la presión que recibió por parte de la Justicia que lo apuró a presentar informes de su gestión desde el 2017 hasta el 2020.
En comunicación con Agenda/Salta, el periodista Cristian Vicecci, relató el estado de abandono en el que se encuentra la gente de la localidad a manos de su Intendente, el Barón del Norte, don Juan Domingo "Juanilo" Aguirre: "Hay un canal de desagüe que es lo único que separa el barrio Facundo Quiroga del cementerio. No existe ningún muro que separe, cualquier persona puede ingresar a cualquier hora".
El dato estremecedor, que aporta Cristian Vicecci, va más allá del enojo de los vecinos con “Juanilo”, porque no presta el servicio de mantenimiento del Cementerio, que pagan como contribuyentes, si no, porque ingreso un gasto millonario por cerrar el lugar, pero jamás concretó la obra: “Supuestamente en los papeles presentados en el Concejo Deliberante, dice que se hizo un gasto total de 5 millones de pesos para cerrar y no encontras el muro".
Ante esta situación y la requisitoria periodística, el intendente ausente de González, J.M Aguirre, solo hace silencio: "Ellos dicen que se hizo, figura solamente en los papeles”. En el medio, los vecinos que ya están cansados de los desmanejos: “Esto se presta para cualquier hecho delictivos, hay malvivientes que van y rompen puertas, roban placas, sobre todo buscan el bronce para comercializar", explicó.
En el cementerio “no hay sereno, si querés ir a las 3 de la mañana, no hay ningún problema", además, detalló que “Juanilo” no le pasa ni la escoba al lugar y que, si no fuera por organizaciones sociales, sería un desastre, según explicó lo realizan personas que cobran: " el 'potencial trabajo', a base de eso hacen el trabajo".
Por último, añadió que ante la situación el intendente hace oídos sordos y no habla, no da explicaciones absolutamente de nada y que: "ni siquiera lo encontras en la Municipalidad, no está nunca, de vez en cuando lo podés encontrar al secretario de gobierno, que es su sobrino".