En una sesión especial, la Cámara de Diputados dio media sanción a la iniciativa que reconoce a la Lengua de Señas Argentina (LSA) como una "lengua natural y originaria que conforma un legado histórico inmaterial como parte de la identidad lingüística y la herencia cultural de las personas sordas" en todo el territorio argentino.
El proyecto de ley garantiza su inclusión plena y fue avalado por unanimidad con 229 votos afirmativos, sin votos negativos ni abstenciones.
La ley llega tras el reclamo histórico de la Confederación Argentina de Sordos, que tuvo su correlato también con una campaña de recolección de firmas lanzada a través de la plataforma de Change en la que lleva reunidas más de 130.000 adhesiones en reclamo de la ley.