Tras múltiples negociaciones e incluso conflictos de último momento que amenazaron con hacer caer el proyecto, finalmente este jueves el Gobierno seguirá de cerca el comienzo del tratamiento de la nueva Ley Bases en el Congreso, confiado en que tiene los votos para que, en esta oportunidad, la iniciativa sea aprobada.
Si bien en la Casa Rosada insistían en que el presidente Javier Milei "tiene los mecanismos para poder gestionar, incluso si no se sanciona" el paquete de proyectos, las autoridades nacionales consideran que el texto ya logró el consenso necesario.
A diferencia de lo que ocurrió a fines del año pasado y principios de este, cuando el asunto se debatió por primera vez, los funcionarios se mostraron más abiertos al diálogo y aceptaron quitar de la discusión todos aquellos artículos que generaban diferencias con la mayoría de la oposición.
De hecho, hasta últimas horas del miércoles, antes de que se convocara formalmente a la reunión del plenario de comisiones de la Cámara de Diputados, en la oficina del titular del recinto, Martín Menem, el secretario ejecutivo de Gobierno, José Rolandi, mano derecha del jefe de Gabinete, Nicolás Posse, recibió a los líderes de distintos bloques para destrabar una pelea por la reforma laboral.