En una reciente charla con Agenda/Salta, el doctor en Filosofía Luis Diego Fernández, autor del libro "Utopías y Mercado", abordó el tema del libertarismo y su resonancia en la política argentina, especialmente en relación con la figura de Javier Milei, el precandidato más votado en las recientes elecciones primarias.
Fernández, reconocido por su análisis profundo del pensamiento libertario, explicó que el libertarismo es una filosofía política de origen estadounidense que se basa en el principio de no agresión. Este principio establece que cualquier acción que interfiera con la libertad y propiedad personal de los individuos, así como con el mercado y las transacciones voluntarias, es considerada inmoral e ilegítima. La filosofía se centra en la libertad negativa, buscando evitar la interferencia estatal en las prácticas individuales y fomentar el respeto mutuo.
Ante ese contexto, el paleolibertarismo, una rama del libertarismo surgida en la década de 1990, destaca por su enfoque que vincula las ideas del libre mercado con un estilo de vida conservador y tradicionalista. Fernández explicó que Milei, “aunque pueda parecer contradictorio al ser un libertario con posiciones reaccionarias, se ubica en esta rama, buscando establecer un vínculo entre el mercado libre y los valores conservadores mayoritarios en la sociedad”.
En relación con los temas de la autonomía personal y las posturas respecto al aborto, Fernández mencionó que mientras la mayoría de los libertarios defienden políticas de descriminalización en áreas como drogas y trabajo sexual, el tema del aborto tiende a dividir a la comunidad. Algunos adoptan una posición "Pro Choice" que prioriza la autonomía de las mujeres, mientras que otros abogan por la vida desde la concepción, conocida como postura "Pro Life". Milei, junto con ciertos paleolibertarios, se inclina hacia esta última posición, creando un punto de discordia dentro del espectro libertario.
En cuanto a Milei y su impacto en las elecciones presidenciales, Fernández indicó que aunque el precandidato representa al paleolibertarismo, deberá lidiar con las realidades políticas y operativas en juego ante la coyuntura nacional. En ese sentido, explicó que ya hubo un cambio en su postura, y por ejemplo, se observa un tono menos extremo en su discurso, con indicios de adaptación a la realidad política y posibles negociaciones en su plataforma con las otras fuerzas.
