Minutos después de conocerse que Cámara de Casación confirmó la condena a seis años de prisión de Cristina Kirchner en la causa Vialidad, Javier Milei puso un tuit con la información. “Todo llega. Fin”, tuiteó el Presidente.
Luego, en otra publicación, Milei señaló que, a partir del fallo, se puede “afirmar sin ninguna duda que (Cristina) es culpable de actos de corrupción”.
“Recuerdo que en la campaña fuimos criticados por no expedirnos sobre la culpabilidad por los mismos que hoy hablan de respeto a las instituciones. En el día de hoy (durante este gobierno) la Justicia Argentina confirmó la condena e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos de la expresidente. VLLC (Viva la libertad, carajo)”, sentenció el libertario.
Semanas atrás, en una entrevista con TN, el primer mandatario había generado polémica al asegurar que le “encantaría meterle el último clavo al cajón del kirchnerismo con Cristina adentro”.
La lectura del veredicto contra CFK se dio este miércoles, unos minutos después de las 11, en la Sala IV de la Cámara de Casación, mientras la expresidenta participaba de una actividad con mujeres en la localidad bonaerense de Moreno.
El tribunal confirmó por unanimidad la condenapor encontrarla culpable del delito de “administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública” en la causa conocida como “Vialidad” por corrupción en la obra pública de Santa Cruz.
Además de la condena a seis años de prisión, la Sala IV de la Cámara de Casación homologó un embargo cercano a los $84.000 millones de pesos, que sería equivalente al perjuicio económico a la administración pública que provocó la causa.
La exmandataria ahora tendrá la oportunidad de apelar el fallo con un recurso extraordinario ante la Corte Suprema de Justicia, donde podrá recurrir el monto de la pena e incluso pedir por su absolución. Se estima que será tratado por el máximo tribunal en 2025.
Parte de esa estrategia política de Cristina Kirchner de ahora en adelante podría interesarle al Gobierno. En primer lugar, porque la deja como la máxima figura de la oposición y principal contrapeso de Milei. Sin embargo, no es la misma Cristina de hace unos años; ahora es políticamente más débil. Milei podría confrontar con ella para aglutinar a los propios y, además, a quienes temen la posible vuelta de CFK al poder.
Por otro lado, Milei necesita completar la Corte Suprema, y ahí se le abren dos posibilidades. La primera es si Milei está dispuesto a ceder el cargo de Manuel García-Mansilla para entregárselo al kirchnerismo. La otra posibilidad, que también está latente, es ampliar el máximo tribunal para que Cristina pueda tener algún juez o colocar a alguno a su gusto.
Estas opciones terminarían en una modificación de la Corte, ya sea completando el tribunal actual, que a partir de diciembre quedará con tres jueces, o ampliándolo.
