Un informe emitido en el programa Periodismo Para Todos este fin de semana revela que Milagro Sala, líder de la Tupac Amaru, habría estado involucrada en la organización de los violentos incidentes ocurridos recientemente en Jujuy, en el contexto de las protestas por la nueva Constitución impulsada por el gobernador y precandidato a vicepresidente Gerardo Morales. Un allanamiento en la casa de Sala, donde cumple prisión domiciliaria, encontró celulares, dinero en efectivo y un listado de personas con planes sociales. Se descubrieron evidencias que sugieren que Sala habría tenido un papel de instigadora en los sucesos.
El jueves, la Justicia ordenó un allanamiento en la residencia de Milagro Sala, ubicada en el barrio Cuyaya de la capital provincial de Jujuy. Durante el procedimiento, se descubrieron 11 teléfonos celulares, una suma de dinero en efectivo y una lista de personas beneficiarias de planes sociales. Estos hallazgos fueron informados por un testigo de identidad reservada, quien también señaló que Sala había recibido la visita de varias personas en las últimas semanas.
El juez Rodolfo Fernández fue el responsable de ordenar el allanamiento. Los investigadores aseguran haber encontrado pruebas que indican que la dirigente social habría desempeñado un papel de instigadora en los incidentes. Estas evidencias se basan en mensajes de texto y de voz, así como en movimientos detectados en los alrededores de la residencia de Sala en las horas previas al ataque a la Legislatura, el 20 de junio, luego de la jura de la nueva Constitución.
El programa Periodismo Para Todos también reveló el testimonio de un comerciante salteño al que Sala habría recurrido para encargar banderas propagandísticas utilizadas en las manifestaciones contra Morales. Según el testimonio, Sala le solicitó banderas para la Tupac Amaru y luego para ATE (Asociación Trabajadores del Estado), asegurando que ella las pagaría. Además, se presentó un audio de WhatsApp en el que Sala menciona el pago en efectivo y la posibilidad de futuros encargos. Según el comerciante, al llegar a la casa de Sala, se sorprendió al ver que tenía acceso a teléfonos celulares y una gran cantidad de personas visitándola, lo que indica que la dirigente social continúa ejerciendo influencia en la organización.
