Alfredo Casero recibió el alta médica tras la operación de cadera que se realizó el lunes y volvió a su casa acompañado por su hijo, Nazareno. Después de algunos días internado en la clínica San Camilo de San Isidro, el actor pudo regresar a su hogar y se lo vio de muy buen humor al salir del sanatorio.
Desde hace meses que el actor estaba sufriendo dolores muy complicados en su cadera. Fueron tan fuertes en su momento que hasta tuvo que hacer la última función de la obra de teatro en silla de ruedas, porque no podía caminar. Hace más de un mes, Casero se se escapó de su internación en la Clínica Zabala, donde permanecía en observación por el problema en la cadera, para no faltar a una de sus funciones teatrales.
En aquel momento, se supo que dos veces el humorista estuvo hospitalizado por ese problema y que por esta razón estuvo a punto de no volver al escenario. “No esperó que le dieran el alta”, había dicho una fuente a este medio.
En los últimos meses, el actor logró volver al primer plano del humor al llevar a su creación, Cha Cha Cha, al teatro. Las funciones finales no las pudo hacer al 100% de manera física: la última vez que subió al escenario lo hizo en silla de ruedas.