La situación en el hospital Juan Domingo Perón de Tartagal no ha mejorado en ningún sentido en los últimos meses y la prueba irrefutable de ello es que desde el 2 de setiembre hasta ayer, 7 pacientes debieron ser derivados al hospital San Roque de Embarcación (hospital de menor complejidad), 4 de ellos en grave estado.
Y se esperaba la derivación de otros tres. Como se sabe en la zona, el hospital cabecera de los departamentos San Martín y Rivadavia no cuenta hace más de 18 meses con servicio de cirugía; si bien cuenta con un solo cirujano, otro profesional médico oficia de tal pero sin tener la especialidad, lo que genera un sinnúmero de inconvenientes para los pacientes.
La situación genera una gran tensión no solo a los enfermos sino al propio personal médico que literalmente debe rezar para que los pacientes más graves no fallezcan antes de llegar a Embarcación.
Una profesional del Perón que pidió estricta reserva en su identidad para no sufrir ningún tipo de persecución por parte de las autoridades de salud, precisó algunos detalles que dan cuenta de la preocupación del propio personal. "Hemos mandando 7 pacientes a Embarcación, cuatro de ellos con peritonitis y hoy (por ayer) están saliendo tres más para ser operados en el San Roque.
La única realidad es que no se quiere pagar para que otros profesionales cubran el servicio de cirugía general y tenemos un solo cirujano que no es de planta sino contratado y otro que oficia de ayudante pero sin tener título habilitante, pero está de vacaciones así que no pueden hacerse cirugías en Tartagal".
Según consignó El Tribuno, el hospital Perón recibe pacientes de Salvador Mazza, Aguaray, General Mosconi y los que provienen del Chaco salteño, del hospital de Santa Victoria. De hecho varios de los pacientes trasladados de urgencia a Embarcación son de esas localidades.
