Se generó una nueva polémica en la socieda salteña. Alguien, todavía no se sabe quién, dejó un perrito encerrado en su auto, que dejó estacionado justo en frente a la feria de la Plaza Güemes. Un grupo de personas se percató de que estaba la mascota en el vehículo porque empezó a ladrar.
Ante la desesperación por rescatarlo, intervino la policía y terminaron rompiendo el vidrio de una de las puertas traseras del auto. Finalmente, lo sacaron y le dieron un poco de agua. Si bien estamos en invierno, las temperaturas de hoy son agradables y el perrito se estaba sofocando.
La situación generó una nueva polémica por cómo se solucionó. Están quienes defienden la mascota de manera indiscutible, y quienes se ponen a pensar quién tendrá que pagar el vidrio del vehículo.
Según lo publicado por el portal Que Pasa Salta, se desconoce el tiempo que el animalito estuvo encerrado y cuál habría sido la circunstancia.