No habrá permisos excepcionales para ningún mantero ni ambulante que quiera volver a vender de manera informal, tanto en las peatonales como en el parque San Martín durante la fiesta religiosa del Milagro salteño.
Así lo ratificó ayer la interventora de Espacios Públicos, Susana Pontussi, quien dejó en claro que la única feria habilitada es y seguirá siendo la del Campo Histórico de la Cruz, tras un fin de semana de convocatorias de algunos grupos para ocupar estos espacios públicos.
"Ellos (los vendedores ambulantes) han hecho una presentación oficial, los recibí el viernes, ellos pretendían volver a entrar a las peatonales y al parque San Martín, les expliqué que eso no era viable, que nosotros tenemos como única feria del Milagro la habilitada en el Campo Histórico de la Cruz, algunos se fueron de la reunión enojados, otros entendieron y el mismo sábado habían varios de la reunión instalados con sus puestos en el Campo de la Cruz", detalló Pontussi.
Comentó que circuló el mismo viernes a la tarde y durante el fin de semana "flyers, arengas, audios, invitando y pidiendo que se sumen para tomar las peatonales y el parque San Martín, por lo que se reforzó la seguridad en el microcentro para evitar la venta ilegal. Trabajan inspectores del espacio público, de ambiente, prevención y emergencias y la Policía de Salta.
Ayer, también, el consejo directivo de la Cámara de Comercio e Industria de la Provincia emitió un comunicado respaldando la decisión de la comuna. Se "insta a las autoridades competentes a mantener el orden establecido en el uso de los espacios públicos", dice el escrito difundido.
Paula Dantur, secretaria de Comercio y Servicios de la entidad, consideró un momento "oportuno" para dar respaldo a la gestión municipal y que hasta ahora no se había dado en este tema; por otro lado, solicitó no volver para atrás. "Nos interesa que se mantenga la peatonal y los espacios públicos con orden y limpieza", señaló la empresaria.
Para Susana Pontussi, es "importante" el respaldo de la Cámara de Comercio, dado que demuestra que no se trata de una decisión solamente del ejecutivo municipal, que tiene que pensar en las distintas necesidades e intereses de la gente que llega para el Milagro. Con los feriantes habilitados se arregló la provisión de agua y el riego del espacio debido a la cantidad de polvo que se levanta.
