Desde que empezó Gran Hermano en octubre del año pasado se formaron varias parejas entre los participantes. Así fue que el ciclo de Telefe unió sentimentalmente a Juliana y a Maxi, a Coti con Alexis (Cone), a Thiago y a Daniela y finalmente a la Tora con Nacho, cuando ella entró por segunda vez a la casa, durante el repechaje.
Estas son las parejas formales, pero después hubo otros vínculos que no prosperaron dentro del reality, pero que el público alentó desde un principio. Ese fue el caso de Julieta y de Marcos, los dos chicos más lindos del juego, según los seguidores del certamen.
Desde un comienzo, comenzó el shippeo en las redes sociales: Marculi los llamaban, asociando los dos nombres de los participantes y augurando un final feliz para la pareja. Sin embargo, Julieta se encargó de informar a todos que ella estaba de novia con un chico llamado Lucca, a quien prometió serle fiel y a quien estaba dirigido todo su amor.
Por esos días, Marcos estaba muy cerca de ella y a veces la cámara lo enfocaba mirándola atentamente, como si obviamente la joven le gustara. Pero después, con el correr de las semanas y de los meses, la relación entre ellos se afianzó en una genuina amistad, que ya no hizo sospechar que podría existir entre ellos otro tipo de vínculo amoroso.
Durante la semana pasada, cuando ingresaron los familiares a Gran Hermano a visitar a los participantes que ya estaban a un pie de la final, se hizo presente el novio de Disney, y ella estalló de alegría. Ambos tuvieron unos minutos para conversar en un sector íntimo del SUM. Hasta Santiago Del Moro les autorizó a estar un rato más juntos, y les aclaró que recordaran pedir el consentimiento a Gran Hermano en caso de querer tener relaciones sexuales.
Cuando el joven se retiró de la casa, Julieta volvió a encontrarse con sus compañeros, y les contó con lujo de detalles cómo fue el reencuentro con su novio al resto de los hermanitos, en este caso, a Marcos, Romina y a Nacho.
Pero en la noche del lunes, ya en la última semana del certamen, entraron a la casa nuevamente los primeros tres eliminados por el público. Tomás Holder, Martina Stewart Usher y Mora Jabornisky traspasaron la puerta de entrada con sus respectivas valijas y enseguida se conoció a qué llegaban: a hacer campaña cada uno de ellos por un finalista.
Así las cosas, Gran Hermano quiso que Martina apoye a Nacho, Mora a Marcos y Tomás a Julieta. Durante la mañana siguiente, el primer eliminado del certamen se encontró en la habitación a solas con el salteño y se entabló una charla íntima en la que Holder le pudo preguntar cómo hizo para estar cinco meses sin mantener relaciones sexuales.
“No sé, es algo que no me preocupa mucho, no estoy desesperado”, respondió Ginocchio y enseguida le devolvió la pregunta. “¿A vos sí?”, le dijo y Tomás fue más específico. “Bueno, desesperado no estoy pero siempre fui muy activo sexualmente, creo que si a los dos meses no hubiera tenido contacto sexual con ninguna chica, me hubiera ido, no habría aguantado”, se sinceró.
Acto seguido, el musculoso quiso saber qué relación tenía con Julieta. “Yo te veía muy pegado con Juli, pero después dije ‘No, Juli tiene novio’, a lo que el salteño le respondió. “No, no, súper amiga es, lo bueno es que salís de la casa con todas las relaciones que formás acá”, concluyó Marcos.