Ayer se realizó la segunda edición del Medio Maratón New Balance, donde 3000 corredores participaron con un gran esfuerzo y perseverancia buscando cumplir sus objetivos.
Cada uno de los participantes tiene su historia detrás y una motivación para completar el recorrido. Este fue el caso de Adriana, una maratonista que vive una conmovedora situación que la hizo fuerte para terminar los 10k.
La mujer de 61 años corrió con una remera en la que tenía estampada una foto de su hija, quien superó el cáncer de mama, junto a su nieto, quien padece leucemia.
«Corro con esta remera por mi hija y mi nieto, me da fuerzas y trato de ser un ejemplo para ellos de que todos podemos. Siempre tengo fe de que todo va a pasar, como pasó con mi hija y ahora con mi nieto que está transitando la enfermedad. Este tipo de actividades te dan fuerzas», dijo Adriana entre lágrimas.
La mujer también agradeció al intendente, Emiliano Durand, y al personal municipal por la organización de las distintas actividades en la que pueden participar los ciudadanos, ya que mencionó que se encuentra realizando otros talleres en la Escuela de Emprendedores.
Sin dudas Adriana es un ejemplo a seguir, no solo por terminar el Maratón, sino también por enseñarles a propios y extraños que hay que tener fortaleza para enfrentar diferentes obstáculos que aparecen en la vida.