Durante la jornada de este jueves en el juicio por la muerte de Diego Maradona declararon cinco médicos que coincidieron en que no revestía ninguna urgencia la operación por el hematoma subdural, que decidió su médico de cabecera, el neurocirujano Leopoldo Luque, uno de los imputados en la causa.
El primero en hablar fue el traumatólogo Flavio José Tunessi, quien expuso ante los jueces que la Clínica Ipensa, donde Diego estuvo internado entre el 2 y 3 de noviembre, que el cuadro no era quirúgico, lo que llevó a Luque a pedir su traslado a la Clínica Olivos. Allí sí se decidió avanzar con la operación.
Maradona había ingresado a Ipensa para someterse a estudios, después de que los médicos no lo vieran en buen estado durante su último cumpleaños, el 30 de octubre, en el que recibió un homenaje en la cancha de Gimnasia.
“No lo vi bien, lo vi adelgazado, caído, no era el que estábamos acostumbrados a ver. Tenía pocas ganas, poco ánimo. Estaba en el banco de suplentes y me dijo ‘no estoy bien’ ”, contó Tunessi, médico del club plantense, según informó el periodista Sergio Farella.
Por su parte, el clínico Marcos Correa, quien hizo la evaluación en Ipensa, aseguró que lo encontró con “depresión” pero nada “significativo” para operarlo, aunque sí constató la presencia de un hematoma subdural.
“Mi impresión es que fue Luque el que decidió trasladarlo” a la Clínica Olivos, donde Diego fue intervenido días después.
Además de Tunessi y Correa, otros tres médicos del sanatorio Ipensa (entre ellos Burry, el jefe de Neurologia), confirmaron que en ese momento no les pareció necesaria ni urgente la operación a la que se sometió el exjugador por el hematoma subdural.
Los profesionales declararon este jueves en los Tribunales de San Isidro. La Fiscalía busca seguir recolectando pruebas para determinar la responsabilidad penal de los siete imputados en la causa, entre ellos médicos, psicólogos y enfermeros que integraban el equipo que atendía a Maradona durante sus últimos días.
La investigación judicial avanza con ritmo firme, y el proceso oral apunta a esclarecer si hubo negligencia o abandono de persona en la atención médica que recibió el ídolo en sus últimos días con vida.
El martes se produjo una de las audiencias más fuertes desde que comenzó el juicio con el testimonio de Verónica Ojeda. La expareja del Diez apuntó contra el médico Luque, la psiquiatra Cosachov y el psicólogo Díaz y el entorno de Diego.