Jacobo Copa, padre de Alejandro, que falleció hace 7 años luego de que fuera impactado por un vehículo y agonizara durante meses, habló con Agenda/Salta sobre lo sucedido y cómo esperan que se haga, al menos, algo de justicia en este caso donde el acusado de atropellar y darse a la fuga niega haber sido parte del siniestro, en tanto que los peritajes indican todo lo contrario. Podrían darle hasta 4 años de prisión, en el mejor de los casos.
"El domingo 27 de marzo de 2016, que era domingo de Pascuas, mi hijo salió a jugar al fútbol, se fue en una moto. En un abrir y cerrar de ojos nos llaman para decirnos que había tenido un accidente en Chacabuco y Tedín, a eso de las 14, estaba en código rojo, salimos todos desesperados, yo fui el primero en ingresar al hospital y cuando lo hago veo a mi hijo en un escenario terrible, todo entubado y me desmayé", recordó Jacobo en la charla.
Luego relató que con el paso de los días no hubo mejoras, el estado de su hijo era grave y desde un principio esperaron lo peor. "Los médicos del San Bernardo nos fueron francos, y los felicito porque siempre nos trataron excelente". El joven estuvo en coma por 5 meses hasta que falleció.
En tanto el causante del accidente que derivó en estos meses de sufrimiento para toda una familia, en primera instancia se dio a la fuga. "Hizo abandono de persona a los dos damnificados, uno era el amigo que lo llevaba en la moto, que tuvo lesiones, pero por suerte se recuperó; pero mi hijo se llevó la peor parte".
Recién a los tres meses de ocurrido el accidente se identificó al causante. Lo hallaron gracias a la colaboración de los vecinos que identificaron al vehículo: un Fiat Uno de color negro. Copa también relató que la muerte de su hijo lo afectó mucho y por un tiempo trató de alejarse de todo el tema legal. "Durante la pandemia me entero que había un supuesto autor que estuvo detenido en su momento, que tenía el auto secuestrado. Luego esperamos con ansias el juicio que se dio ahora", explicó.
El juicio inició la semana pasada, la defensa presentó sus testigos, la querella hizo lo propio con las pruebas. El acusado, de apellido Matorras, según su defensa, no sería el culpable del accidente ni su auto el que estuvo implicado. "Presentaron pruebas inverosímiles", dijo Copa de la defensa. Además detalló que los peritajes dan un 100% de coincidencia con el vehículo en cuestión.