Semanas atrás, pobladores de los diversos parajes del municipio de El Potrero manifestaron una innumerable lista de quejas relacionadas con el mal servicio que brinda la empresa de transportes Palavecino. Entre ellas: "El estado de las unidades, la poca disponibilidad y frecuencia para viajar a Rosario de la Frontera y, sobre todo, la mala atención del chofer", ya que aseguraron que suele poner la música a alto volumen" y que además "viajan todos amontonados".
Al poco tiempo de la publicación, las unidades se rompieron, los vecinos no pudieron viajar y esa situación, terminó por colmar el vaso y exigieron una reunión con el intendente Carlos Mur Reynaga para manifestar sus problemáticas y para exigir una nueva empresa de transporte.
Tras las publicaciones y las quejas de los pobladores, días atrás, una familia y una señora, al momento de esperar el transporte, aseguraron que el chofer, "no los quiso levantar", justamente por expresar sus testimonios.
Indignados y perjudicados por la actitud del chofer, nuevamente convocaron a El Tribuno al paraje de San Lorenzo para visibilizar sus reclamos, pero sobre todo para implorar que los dejen viajar a Rosario de la Frontera para poder realizar sus trámites y controles médicos.
"Nosotros siempre tenemos que viajar con mi esposa a Rosario de la Frontera para hacerle los controles a mi hijita, y el chofer para no llevarme me pone un montón de pretextos. Una vez hasta me dijo que no me podía subir porque el colectivo era muy viejo", relató a El Tribuno Carlos Díaz, uno de los tantos vecinos que hizo públicas sus quejas.
Denuncia policial
Teresa Jaime, quien también quedó en la parada lista pero sin poder viajar a su lugar de trabajo, decidió radicar una denuncia contra el chofer. "Mi mala experiencia la tuve porque me tocó viajar a trabajar en Antilla y el chofer levantó a una pasajera que estaba metros antes de la parada mía y cuando tocó mi turno siguió de largo, pero en cambio siguió levantando gente en las paradas siguientes", contó la vecina.
"Y la verdad es que uno sigue reclamando porque ya estamos cansados del mal servicio de siempre, entonces, como al chofer no le gustaron los reclamos que hacemos decidió no levantarnos, lo cual nos parece muy injusto porque después nosotros terminamos caminando, y en el peor de los casos pagando remise de ida y de vuelta, justamente porque los colectivos siempre se terminan rompiendo", aseguró.
"Además no puede decir que no me vio porque le hice un montón de señas y aun así no paró, y tuve que llamar a una moto de Antilla para que me viniera a buscar, entonces, no me quedó otra que hacer la denuncia. Toda la semana que viene tengo que viajar a Rosario de la Frontera para hacer mis tramites, pero si no me levanta, cómo los voy a hacer, por eso en nombre mío y de los demás usuarios le pedimos al chofer que entienda que nuestras quejas no son personales en contra de él, sino que lo que pedimos es que mejore la situación de las unidades y si no que den lugar a otra empresa", expresó la usuaria.
Fuente El Tribuno
