Elon Musk compró Twitter por 44.000 millones de dólares en octubre de 2022, y desde entonces perdió la mitad de sus ingresos por publicidad, según reconoció él mismo este fin de semana a través de la red social. “Necesito alcanzar un flujo de caja positivo antes de tener el lujo de cualquier otra cosa”, contó.
Los ingresos publicitarios han sido un tema delicado para Elon Musk desde que los anunciantes comenzaron a abandonarlo, preocupados por la moderación del contenido, los despidos masivos y demás decisiones que tomó que dejaron en evidencia la incertidumbre del futuro de la compañía. A la escena de la crisis de Twitter se le sumó el lanzamiento de Threads, su competencia, que ya supera los 150 millones de usuarios a tan solo semanas desde su publicación.
Es por esto que el propio Musk decidió dar un paso al costado como CEO de Twitter, y en cambio le cedió el puesto a Linda Yaccarino, exejecutiva de marketing de NBCUniversal, quien probablemente tendrá el objetivo de traer de vuelta a los auspiciantes que se fueron.
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La caída de ingresos de Twitter
El estado de la publicidad de Twitter es crucial porque los anuncios representan el 90% de los ingresos de la empresa. Según The New York Times, los ingresos publicitarios de Twitter en Estados Unidos durante las cinco semanas desde el 1 de abril hasta la primera semana de mayo fueron de USD 88 millones, un 59% menos que el año anterior.
Asimismo, la compañía pronosticó que sus ingresos publicitarios este mes disminuirán al menos un 56% cada semana en comparación con hace un año, según un documento interno.
En un evento de audio de Twitter Space hace una semana, Elon Musk dijo que los auspiciantes en Europa y Norteamérica ejercieron “una presión interna” sobre la empresa, lo cual provocó que “la mitad de nuestra publicidad” desaparezca, y aseguró que “están tratando de llevar a Twitter a la bancarrota”.
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Twitter también empezó a tener problemas con grandes anunciantes, como es el caso de Disney. En abril, Twitter puso por error una verificación dorada en una cuenta que, si bien tenía el nombre Disney, no era propiedad de la empresa. Esa cuenta empezó a publicar insultos raciales, lo que llevó a que funcionarios de Disney exigieran a Twitter no solamente una explicación sino además una garantía de que no iba a volver a suceder.
Además, según el medio citado, seis ejecutivos de agencias de publicidad que trabajaron con Twitter le dijeron a sus clientes que continúan limitando el gasto en la plataforma por la “confusión sobre los cambios del Sr. Musk en el servicio” y “las preocupaciones sobre la presencia persistente de contenido engañoso y tóxico en la plataforma”.
Musk busca reducir los costos
Elon Musk incorporó una variedad de medidas de reducción de costos, como dar marcas de verificación azules con una membresía de Twitter Blue y poner Tweetdeck detrás de un muro de pago. Además, anunció que los creadores de contenido podrán obtener una parte de los ingresos publicitarios del sitio, para alentar a más creadores a unirse.
“Tiene una deuda de USD 13.000 millones que deberá pagar a fines de julio”, expresó Lucy Coutts, directora de inversión de JM Finn, una empresa de gestión patrimonial. En diálogo con el programa Today de la BBC, opinó que cree que Musk revertirá la situación de Twitter pero que “tomará más tiempo”.